Sufrir para ganar (98-96)

Fletcher Magee (foto: Obradoiro de Basket)

El Obradoiro sobrevivió a una doble prórroga y consiguió amarrar su primera victoria de la temporada en un partido agónico ante el Bilbao Basket. Los de Moncho Fernández fueron a remolque de los vascos durante toda la primera mitad, con problemas en ataque y defensa hasta verse 10 abajo (29-39). Ahí surgió el primer arranque de genio de Fletcher Magee, quien con 3 triples consecutivos reenganchó al Obra al partido, llegando al descanso solo a 3 puntos (38-41). En el tercer cuarto vivieron los locales sus mejores minutos, de nuevo con Magee inspirado, y a pesar de las dificultades para frenar las penetraciones de Jaylon Brown la diferencia era de +7 al llegar al último período (64-57). En ese momento llegó el apagón ofensivo de los nuestros, que se vieron igualados de nuevo a falta de 6 minutos (66-66). El Obra parecía llegar mejor al tramo final gracias al acierto desde la línea de libres, pero un triple de Kulboka empataba el partido y Brodziansky no podía evitar la prórroga con su tiro corto en el último segundo (73-73). Los (primeros) 5 minutos adicionales fueron liderados casi en todo momento por los visitantes pero de nuevo los tiros libres devolvieron al Obra a la lucha, evitando Kravic la canasta final de Balvin (84-84). En la segunda prórroga apareció de nuevo un estelar Magee (25 puntos y 5 triples para 21 de valoración final), con un estratosférico 3+1 que lanzó al Obra hacia la victoria (94-89). Aún así, los visitantes volvían a empatar el partido de la mano de Kulboka, pero 2 tiros libres de Calloway ponían al Obra 2 arriba y la penetración de Brown mas el palmeo de Balvin se paseaban por el aro sin llegar a entrar (98-96). Con este triunfo, el Obradoiro sale de la zona más peligrosa y coge aire con un record de 1-2.


Partido trascendental para el Obradoiro en este complicado inicio de temporada, recibiendo la visita de un Bilbao Basket invicto ante un Sar con una entrada aceptable. Los "hombres de negro" comenzaban la lucha con Rousselle, Martínez, Bouteille, Kulboka y Balvin, mientras el Obra lo hacía con Calloway, Magee, Czerapowicz, Daum y Kravic. Los locales sufrían casi desde el inicio, con problemas en ataque y concediendo canastas con excesiva facilidad. La defensa de un 4 atípico como Kulboka y las buenas acciones de Rafa Martínez lanzaban a Bilbao hasta 6 arriba (5-11), aunque Kostas salía al rescate con 5 puntos seguidos que mantenían al Obra con vida. Los de Moncho Fernández no veían aro ni debajo de canasta, pero otros 3 tiros libres de Kostas y una suspensión lateral de Max de Zeeuw dejaban al Obra solo 2 abajo al final del primer cuarto (15-17).

Los problemas crecían para el Obra en el segundo cuarto, con la segunda unidad visitante superando nuestras defensa gracias al eléctrico Jaylon Brown. La ventaja local aumentaba paso a paso con el Obra atascado y apenas una canasta de Brodziansky en más de 5 minutos. Lammers imponía su ley bajo los aros, aunque Kravic rompía la sequía al cazar un rebote ofensivo para anotar. Czerapowicz dejaba un matazo en penetración para el resumen de mejores jugadas y Brodziansky añadía un triple para bajar la desventaja a solo 2 puntos (26-28), pero Jaylon Brown lanzaba a los suyos con un 3+1 sobre Kostas, respondido desde los 6,75 al instante por el griego. Otro triple del brillante Kulboka y los tiros libres de Balvin provocaban un parcial de 0-7 que ponía al Obra 10 abajo y contra las cuerdas (29-39). En medio de la atonía del juego local, en ese momento crítico aparecía un espectacular Magee, con 3 triples consecutivos en menos de 1 minuto, para devolver un parcial de 9-0 y devolver al Obra a la pelea (38-39). La caldera volvía a creer tras ese arranque de genio del tirador obradoirista, que mantenía a los nuestros con vida al llegar al descanso solo 3 abajo (38-41).

El panorama cambiaba tras el paso por los vestuarios. El Obra comenzaba buscando por fin a Brodziansky en el poste bajo, y aunque las penetraciones del imparable Brown mantenían en ataque a los suyos, Calloway anotaba un triple y Kravic machacaba tras bien juego entre pivots. Magee lideraba a los nuestros con valentía, buscando una suspensión lateral de 4 metros y anotando los libres tras una penetración con falta. Con Brown martilleando una y otra vez nuestro aro, ahora con un 2+1, la igualdad era máxima en el marcador, de nuevo con Brodziansky desde el poste bajo y un colosal Magee clavando un espectacular 3+1 para dar inicio a un parcial de 6-0 que culminaba Kravic con otro matazo tras robo y asistencia de Muñoz. Calloway penetraba para dar al Obra una renta máxima de 6 puntos (59-53), pero Bilbao se aferraba al partido a pesar del esforzado 2+1 tras varios rebotes ofensivos de Daum, que con otros 2 libres más elevaba a +7 la diferencia al terminar el tercer cuarto (64-57).

El Obra se paraba en ataque por completo al comenzar el cuarto período. Un 2+1 de Rousselle y un triple de Rodríguez, con el Obra incapaz de siquiera tirar a canasta sin agotar sus posesiones, devolvían la incertidumbre al marcador mientras solo Brodziansky, con una suspensión frontal corta, rompía de forma aislada la sequía de nuestro ataque. Los triples de Kulboka volvían a entrar en escena, empatando el partido de nuevo a falta de 6 minutos (66-66). Un solitario tiro libre de Brodziansky mantenía al Obra por delante con el partido frenándose por completo y ambos equipos incapaces de ver aro. Los nuestros cargaban bien el rebote de ataque y en medio de la enorme tensión volvían a encontrar en el poste bajo a Brodziansky. También Czerapowicz aparecía para anotar en penetración y poner 4 arriba al Obra con menos de 3 minutos por delante (71-67). Un 2+1 de Balvin tras rebote en ataque ponía en riesgo a un Obra que se salvaba a falta de 7 segundos al anotar Kravic los tiros libres para el +3 (73-70). El Obra decidía defender sin falta, pero Kulboka encontraba el espacio y clavaba un triple para el empate (73-73). Con menos de 3 segundos, Brodziansky recibía en el poste bajo pero erraba el lanzamiento para ganar. Nos íbamos a la prórroga.

Bilbao golpeaba primero en ataque y el Obra respondía para igualar en el inicio de la prórroga. Calloway no erraba desde la línea de libres y añadía un triple importantísimo tras una larga jugada de ataque con varios rebotes ofensivos de los nuestros. Otra bandeja imparable de Brown era contestada con una buena jugada interior de Kravic, pero 4 puntos de Balvin ponían al Obra contra las cuerdas de nuevo con poco más de minuto y medio para el final (80-84). El triple casi decisivo de Bouteille no entraba y el Obra se aferraba a su suerte gracias a los tiros libres y a una buena defensa. 2 de Brodziansky y otros 2 de Vasileiadis igualaban de nuevo el partido (84-84), dejando la última posesión a los visitantes tras el rebote ofensivo de Brown. Balvin recibía bajo el aro pero Kravic taponaba desde atrás y llevaba el partido a su segunda prórroga.

De nuevo Bilbao se ponía por delante en la segunda prórroga con la enésima penetración de Jaylon Brown (84-86). Los tiros libres de nuevo, con Calloway en la línea, y otra buena jugada interior para Brodziansky, ponían por fin por delante al Obra tras muchos minutos, aunque los nuestros se empeñaban en el triple y no remataban la faena. Kostas dejaba su lugar a Magee, que inmediatamente asumía la responsabilidad en ataque para contrarrestar al indefendible Brown. El escolta del Obra anotaba primero de 2 y seguidamente la canasta del partido, con un brutal 3+1 en escorzo que parecía romper el partido por fin (94-89). Brown sostenía todavía las esperanzas visitantes y, aunque Magee anotaba desde la línea de libres tras forzar falta en su penetración, de nuevo aparecía el lituano Kulboka, con un triple, un robo a Daum y 2 libres tras forzar falta, para empatar el partido a falta de 21 segundos (96-96). Bilbao decidía hacer falta para tener la última posesión, aprovechando Calloway los 2 tiros libres son 13 segundos para terminar (98-96). Con Sar al borde del infarto, la penetración de Brown chocaba contra la defensa obradoirista, de nuevo con Kravic en el tapón, y el palmeo de Balvin bajo el aro se paseaba por el mismo para salirse mientras sonaba la bocina del final de partido. El Obradoiro salvaba un partido clave en este inicio de temporada e inauguraba su casillero de victorias tras 50 minutos de drama con final feliz.

Datos a destacar

• partido agónico en el que la victoria final justifica todo el sufrimiento padecido. El Obra supo corregir errores de partidos anteriores: no recibió canastas fáciles en transición, perdió muy pocos balones (8 frente a los 17 de Bilbao) y no sufrió la sangría en el rebote defensivo de las 2 primeras jornadas (45-43 en rebote). También, y sobre todo por lo decisivo en toda la parte final, el acierto espectacular desde la línea de libres (28 de 30, ¡93%!)
• en lo negativo: malos porcentajes de tiro (20 tiros más a canasta que Bilbao), sufrió mucho en el 1x1 en penetración de Brown (quien mantuvo a Bilbao vivo durante casi toda la segunda mitad) y no tuvo fluidez en ataque en muchos momentos, sin acabar de aprovechar del todo ventajas en el poste bajo. Al final, en un partido tan igualado, los pros y los contras se equilibraron casi por igual (92-100 en valoración conjunta) y todo se decidió por un balón que se paseó por el aro y no llegó a entrar
• FLETCHER MAGEE: el héroe del partido. Sus rachas de acierto en el tiro salvaron un casi match-ball en el segundo cuarto y sus apariciones estelares en ataque dieron al Obra la posibilidad de vencer cuando más quemaba la bola. Valentía máxima del rookie, que además se mostró muy activo en defensa intentando el robo y peleando a pesar de no ser esa su máxima virtud. Quizás le cuesta algo todavía leer el juego en ciertas ocasiones, pero es un gusto ver a un chico tan joven y con tanto desparpajo en la pista. 25+2+2 en 27 minutos, con 5 triples y 5 faltas provocadas, para 21 de valoración
• EARL CALLOWAY: serio en la dirección, sin perder balones y aportando muy de vez en cuando en anotación (un par de triples en momentos importantes y sobre todo el acierto en los libres). Sin embargo, quizás le costó algo mover al equipo con fluidez e ideas claras dentro de ese tono seguro pero escaso en riesgo. En defensa cumplió en los cambios y estuvo a nivel correcto. Al final, casi sin hacer ruido, sumó y mucho para el equipo. 14+2+5+2 en 36 minutos, con 4 faltas provocadas, para 21 de valoración
• CHRIS CZERAPOWICZ: guadianesco partido del sueco, con un par de acciones brillantes en penetraciones pero sin acierto en el tiro exterior. En defensa paró bien al peligroso Bouteille y cargó con fuerza el rebote de ataque (5 rebotes ofensivos). Podría haber aprovechado en ciertas ocasiones su superioridad física ante sus pares llevándolos al poste bajo. 5+6 en 30 minutos, para 2 de valoración
• MIKE DAUM: con muchas ganas en cada acción (cargando bien el rebote de ataque) aunque sin aparecer demasiado en ataque. Sufrió de salida al complicado Kulboka, aunque peleó una buena canasta en el tramo final del tiempo reglamentario (y también perdió un balón clave en ese período decisivo). Se le nota la juventud en ciertos errores de novato, pero muestra buenas maneras. 7+3 en 16 minutos, para 6 de valoración
• DEJAN KRAVIC: peleó por todo lo alto con el enorme Balvin (números aparte, más o menos mantuvo la igualdad), saltó al tapón en penetraciones (clave en las jugadas finales de las 2 prórrogas) y buscó opciones cerca del aro en ataque. Cuando sale muy fuera pierde peligro en ataque, al carecer de un mínimo tiro, pero su trabajo bajo los aros, en los bloqueos y en la defensa son fundamentales. De nuevo rozando el doble/doble. 12+9+1+2 en 40 minutos, para 16 de valoración
• VLADI BRODZIANSKY: en defensa volvió a tener bastantes problemas, y más teniendo que emparejarse con un 4 tan poco habitual como Kulboka, pero en ataque, y a pesar de no ser utilizado ese recurso con tanta frecuencia como parecía deseable, su calidad en el poste bajo le dio muchos puntos al Obra, especialmente en la segunda mitad del partido. Al eslovaco le pudieron las prisas con ciertos intentos triples poco razonables y con faltas tontas en defensa (acabó eliminado), pero su capacidad intimidatoria en las ayudas bajo el aro también fue clave en las jugadas finales. +14 con él en cancha, máximo del equipo. 18+6+3 en 34 minutos, con 3 tapones y 5 faltas provocadas, para 20 de valoración
• KOSTAS VASILEIADIS: lejos de su mejor momento, con problemas en defensa ante jugadores mucho más rápidos de piernas y sin acierto en el triple (2 de 10), pero aún así con la experiencia y picardía para ir sumando puntos en algún triple y sacando faltas a sus defensores (7 de 7 en libres). En el tramo final del partido no encontró la forma de ayudar al equipo en ataque. 15+2 en 25 minutos, para 9 de valoración
• ÁLVARO MUÑOZ: con ganas de hacer cosas, ayudando a subir el balón y participando en el movimiento de bola en ataque, pero sin acierto en sus intentos triples. En defensa voluntarioso. 0+0+1 en 19 minutos, para -4 de valoración
• PEPE POZAS: partido gris del malagueño, con problemas para llevar con fluidez el ataque (se comió todos los malos minutos del segundo cuarto hasta el -10) y con muchas ganas pero sin poder dar ese plus típico suyo en defensa. No compareció en todo el tramo final del partido. 0+3 en 14 minutos, para -3 de valoración
• NICK SPIRES: flojos (y muy pocos) minutos del sueco en la cancha, poco contundente en sus acciones en ambos aros, sobre todo en ataque donde se comió un par de penetraciones por no ir con fuerza. 0+1 en 6 minutos, para -2 de valoración
• MAX DE ZEEUW: aparición testimonial en la cancha del belga, con una suspensión lateral anotada pero de nuevo muy lejos de poder aportar algo a nivel alto para el equipo. 2+0 en 3 minutos, para -2 de valoración

Sufriendo lo no escrito, pero finalmente el Obradoiro consiguió amarrar la primera victoria de la temporada ante un Bilbao Basket que seguramente acabará siendo un rival directo por la permanencia. La perspectiva de comenzar el curso con un 0-5 o peor, echando un vistazo al calendario de los primeros meses, hacía que este partido estuviera señalado con mayúsculas como uno de los que no se podía perder. Cogiendo aire tras este triunfo, el Obra podrá afrontar los exigentes próximos partidos (visita a La Laguna y llegada del Madrid a Sar) con un poco más de tranquilidad, por más que haya que asumir que esta temporada va a ser extremadamente dura en su primer tercio. La aparición de Magee y la mejoría (aún con matices) del hasta ahora "desaparecido" Brodziansky son argumentos para ver el futuro cercano con algo más de optimismo.