Febrero perfecto (63-64)

(foto: ACB Fotoclick)



El Obradoiro cerró el mes perfecto con su tercera victoria consecutiva, esta vez en la cancha de un mermado Lucentum Alicante, en un final agónico resuelto con un tiro libre de Levon Kendall a falta de 1 décima de segundo. El partido tuvo muchas alternativas, con parciales grandes por ambos bandos, pero casi siempre con el Obradoiro por delante. El equipo se supo rehacer tras encajar un parcial de 15-0 hasta el primer minuto del segundo cuarto (22-13), para devolverle la moneda a los locales con un nuevo parcial de 8-29 iniciado por un triple de Washington, comandado por Bulfoni y Kendall y rematado con un triple de Ere antes del descanso (30-42). El tercer cuarto fue de nuevo una cruz para los nuestros, encajando otro tremendo parcial en contra de 15-3 (45-45), pero los nuestros supieron gestionar la situación sin dejar de consegir pequeñas ventajas hasta el final. En un último cuarto en el cual casi solo se anotó desde la línea de libres, Hopkins resultó decisivo con 4 puntos consecutivos y, en un último minuto de suspense por los errores desde la línea, finalmente Kendall sacó una falta a solo 1 segundo y supo anotar el primero de sus tiros libres para darle al Obra su séptima victoria de la temporada. El equipo sigue con 3 rivales por debajo, con Murcia y Estudiantes a 1 y ya más lejos el Blancos de Rueda a 3 triunfos.


Se presentaba muy propicia la visita al Lucentum alicantino por los problemas físicos de los locales, con nada menos que 3 jugadores descartados por lesión (Rafa Luz, Urtasun y Ellis). Vidorreta sacaba de inicio a Llompart, Dewar, Stojic, Ivanov y Barnes, casi sin recambios de calidad en el banco, mientras que el Obra salía Andrés, Corbacho, Ere, Lasme y Hopkins, con Palacio en el banco por sus problemas físicos durante toda la semana. Los nuestros comenzaban entonados, sobre todo Ere con 5 puntos instantáneos. El equipo imponía su buena defensa y Corbacho clavaba su primer triple para establecer un primer parcial interesante (5-10). La lucha entre Lasme e Ivanov repartía faltas para ambos, con el pivot del Obra más perjudicado al cometer su segunda en ataque, obligando a la entrada prematura de Kendall. Andrés aprovechaba un bloqueo para anotar un buen triple y robaba un balón, fallando un nuevo intento de 3 con 7-13 en el marcador. A partir de ahí, el cataclismo: los nuestros no volverían a anotar hasta el segundo cuarto, con Junyent con grandes problemas para aprovechar sus opciones bajo el aro rival y con el equipo incapaz casi de tirar a canasta, y el equipo local iba anotando de la mano de un Kaloyan Ivanov que remataba el cuarto con un triplazo afortunado desde más de 10 metros sobre la bocina. 20-13 y parcial abierto de 13-0.

El segundo cuarto se inciaba agrandando el parcial en contra de los nuestros con una canasta de Dewar para cerrar un 15-0 (22-13), pero estaba visto que iba a ser un partido de vaivenes, y Deron Washington rompía la sequía con un buen triple. Otro triple de Dewar devolvía el +9 a los locales, pero Palacio aparecía con una buena penetración y un 2+1, seguido por una suspensión lateral de 6 metros de Bulfoni. Ahora eran los locales los que no podían con nuestra defensa (mención especial para Deron), con Ivanov en el banco, y el Obra sí iba encontrando sus opciones en ataque con Kendall sacando faltas y acertando irregularmente desde la línea de libres. Bulfoni clavaba 2 triples seguidos para relanzar al Obra, y Hopkins aportaba otra canastita de las suyas para un impensable +7 para los nuestros (27-34). Un triple de Dewar era la única respuesta local ante un Obradoiro que terminaba el cuarto en festival, con canasta de Ere, mate al contraataque de Kendall y triplazo otra vez de Ere sobre la bocina. 30-42, 12 arriba y todo de cara.

El tercer cuarto comenzaba con un Ere demasiado revolucionado, pero sin que los locales tampoco vieran aro ante la buena defensa de los nuestros. Sin embargo, un par de triples de Dewar y Llompart animaban al Lucentum, y en medio del caos ofensivo del Obra Ivanov castigaba de nuevo desde los 6,75 para poner las cosas más apretadas. Lasme no era el de partidos anteriores y Corbacho tampoco atinaba en sus tiros, lo que dejaba al equipo romo en la parte ofensiva. Otro triple más, esta vez de Rautins, cerraba un parcial de 15-3 para los locales que empataba de nuevo el partido (45-45). Y otra vez, cuando todo pintaba peor, los nuestros se agarraban a la pista y, con Kendall enorme en defensa y Palacio y Junyent anotando mantenían a los nuestros por delante al cierre del cuarto (45-49).

Lasme cometía una tonta cuarta fala al inicio del último cuarto, y cada ataque era un suplicio tanto para Lucentum como para Obradoiro. Deron anotaba un libre y Stojic acertaba con suerte en una penetración (49-50). Oriol aguantaba bravamente en defensa al físico Koné aunque erraba un intento triple, y Kendall cometía 2 faltas consecutivas que lo ponían al borde de la eliminación. Nadie era capaz de anotar y los minutos seguían pasando mientras la tensión crecía exponencialmente. Lasme volvía y repartía tiros libres con el local Stojic para dejar todo igual, y con todo más espeso que nunca era la muñeca del hasta entonces desacertado Corbacho la que desatascaba la situación desde los 6,75 y en el límite de la posesión (51-55). Con Lasme fuera por su quinta falta, otra vez innecesaria, los nuestros perdían la oportunidad de sentenciar el partido con sendos triples de Ere y Corbacho, mientras que el local Rautins no fallaba desde los 6,75 y volvía a igualar el partido (55-55). Con solo 3 minutos por delante, era el momento del más listo, y ese no es otro que Bernard Hopkins. El veteranísimo ala-pivot obradoirista asumía la responsabilidad y ponía al Obra con todo de cara en el último minuto tras un par de canastones de los suyos y otro par de libres (59-61). Andrés reboteaba, controlaba el balón y doblaba a Kendall, pero el casi seguro 2+1 se salía del aro y el canadiense solo acertab con uno de los libres. Llompart respondía con una hábil canasta a falta de 26 segundos, con Moncho pidiendo tiempo muerto tras casi perder el balón en ataque (61-62). Andrés recibía falta pero solo anotaba el primero de los libres y Koné barría el segundo tiro del aro, y de nuevo Llompart anotaba otro canastón cuando solo restaba 1 segundo en el marcador, empatando el partido a 63. Pero Moncho diseñaba una jugada perfecta para un alley-oop sobre Kendall, que Llompart evitaba cometiendo falta clara, a pesar de las protestas del base. Levon anotaba el primer tiro y tiraba a fallar el segundo, dando un sufrido triunfo al Obradoiro que supone una brillante racha de triunfos consecutivos sobre el 3º, 4º y 5º de la clasificación. El mes de febrero, que se presumía iba a ser poco menos que la tumba del Obradoiro, se cierra con un enorme 3-0 que deja al equipo en una posición más que apetecible, con 3 rivales por debajo y con la moral de jugadores y afición por las nubes. Vivir para ver.

Datos a destacar

• el Lucentum llegaba al partido en cuadro, con solo 1 base (tuvo que debutar el joven Kouril) y sin su mayor arma exterior (Ellis). El Obra tenía que jugar un partido de desgaste, y el trabajo sobre Ivanov (3 de 9 en tiros y 6 pérdidas) hizo que los locales lo tuvieran muy difícil para equilibrar el juego
• partido de parciales escandalosos: el Obra se tragó un 15-0 en contra, respondió con un enorme 8-29 y encajó de nuevo un 15-3. Al final prevaleció la sangre fría y las últimas posesiones se jugaron con buen movimiento de balón y buscando las mejores opciones
• en un partido en el que Lasme y Corbacho no rindieron como en anteriores ocasiones, el equipo supo encontrar desde el banquillo la forma de compensar los minutos y los puntos de los menos acertados. Bulfoni y Washington anotaron 13 puntos entre ambos y todos los jugadores que jugaron anotaron
• partido de desgaste equivale a tener que trabajar mucho en defensa. El Obra cumplió con ese precepto y consiguió anular el ataque alicantino en la mayorparte del encuentro. Solo una racha de aciertos locales en el triple igualó el partido, pero la defensa sobre Ivanov y los interiores fue fundamental para el triunfo
• la jugada final salió redonda. Mérito para el trabajo táctico de Moncho Fernández, no solo por dicha jugada, pero sí como ejemplo de lo que es hacer un buen trabajo desde el banco
• BERNARD HOPKINS: una vez más, y van... Brutal mes de febrero del "abuelo" del equipo, rematado con otro partido para enmarcar y un par de minutos finales para quitarse el sombrero. Listo como nadie, sacrificado como el que más y profesional por encima de todo. Espectacular su +20 en la estadística del +/-. 10+5 en 21 minutos para 11 de valoración
• ANDRÉS RODRÍGUEZ: tuvo en sus manos los minutos calientes del partido y tuvo la cabeza fría y la seguridad necesaria para ganar el partido. Trabajó mucho sobre Llompart, aunque el gran base alicantino se salió en las últimas jugadas, pero no por demérito del gran trabajo defensivo del base obradoirista. No miró casi al aro, pero en defensa y en la dirección de juego estuvo a gran nivel. 4+1+2+2 para 4 de valoración
• ALBERTO CORBACHO: no tuvo un buen día en el tiro (2 de 8 triples), pero aún así apareció con un triple letal mediado el último cuarto. Con poco protagonismo en esta ocasión. 6+1 para -1 de valoración
• EBI ERE: con momentos de brillantez al inicio del partido y antes del descanso, se perdió en el tercer cuarto con varias decisiones precipitadas. Peleó duramente en defensa y colaboró al triunfo con sus rachas, a falta de mayor continuidad. 10+2 para 2 de valoración
• STEPHANE LASME: no fue el de partidos anteriores, recordando más bien al jugador de las primeras jornadas que se cargaba rápidamente de faltas absurdas. Menos de 15 minutos en cancha por culpa de dichas faltas, y escasa participación en el partido. 5+1 para 0 de valoración
• LEVON KENDALL: con Lasme fuera y Oriol en sus precarias condiciones, Kendall se comió 33 minutos en cancha en los que fue importante para el equipo. Miró muy poco al aro y falló varios tiros libres, pero se fajó en defensa con momentos muy brillantes, defendiendo muy bien a Kaloyan Ivanov, sacando faltas y anotando el tiro libre final. 9+5+2+3, con 6 faltas provocadas, para 11 de valoración
• TUKY BULFONI: gran aparición en el segundo cuarto cuando más feo pintaba el partido, con 2 triples seguidos que lanzaron al Obra. Otra vez fue clave asistiendo a Hopkins para la canasta del 59-61. Aportaciones puntuales en momentos clave, y casi siempre acertadas. 8+1+1 para 10 de valoración
• MILT PALACIO: arrastraba molestias físicas durante la semana, pero pudo finalmente ayudar al equipo en la cancha. Importante en el segundo cuarto, dirigiendo con brillantez al equipo, en los minutos finales no participó. Buenos números. 5+3+5 para 13 de valoración
• DERON WASHINGTON: trabajador incansable, inició el gran parcial del segundo cuarto con un triple y fue partícipe de la victoria con su buen trabajo defensivo y sus aportaciones puntuales ofensivas. Minutos de calidad para el equipo. 5+4+1+3 para 10 de valoración
• ORIOL JUNYENT: lo da todo a pesar de sus precarias condiciones físicas, y su profesionalidad le permite aún así ayudar al equipo en momentos puntuales. Importante canasta al final del tercer cuarto para cortar la reacción local. No se le puede pedir más. 2+1 para -3 de valoración

El Obradoiro suma y sigue. Tercera victoria consecutiva ante otro de los gallitos de la liga. El siguiente en visitar Sar será el Real Madrid, y la afición sueña con repetir el milagro de hace 2 temporadas. La buena noticia es que el equipo va a llegar a ese partido con un pequeño colchón en la clasificación que nadie habría imaginado un mes atrás. Lo que a finales de enero parecía negrísimo se ha tornado en un remanso de tranquilidad y de optimismo tras cerrar febrero con un parcial de 3-0. La presumible derrota ante el todopoderoso Madrid no ha de ser obstáculo para que Sar se llene y la caldeira truene como en sus mejores momentos, con un equipo que lucha hasta el final y que se merece el reonocimiento de la grada tanto en los momentos buenos de ahora como en los malos de semanas atrás. Por ahora y van 7 triunfos, pero sobre todo 3 rivales por debajo. Hay motivos para el optimismo, sin duda.