lunes, 14 de marzo de 2022

Como en los mejores tiempos (81-76)

Laurynas Beliauskas (foto: ACB Photo)

Una sólida actuación coral del equipo, con el aderezo de un espectacular partido de Laurynas Beliauskas (22 puntos con 6 triples para 22 de valoración, topes personales en ACB), permitió al Obradoiro derrotar al Baskonia y hacerse con el octavo triunfo de la temporada. Los de Moncho Fernández supieron competir de principio a fin en un partido muy cerrado durante una primera mitad de escaso acierto anotador. El Obra sufría ante el rebote ofensivo visitante, pero a cambio se sostenía con una buena defensa y las conexiones entre Hobbs y Birutis para mantener mínimas ventajas en el primer cuarto (17-16). La irrupción de un infalible Beliauskas en el triple, con 3 seguidos, lanzaba a los nuestros hasta un +8 (29-21), pero la reacción baskonista frenaba nuestro ataque y volvía a ajustar la situación al descanso (33-30). En el tercer cuarto ambos equipos mejoraban por fin en ataque, con aportación coral en los locales y un gran Enoch para los visitantes, dejando todo igualado para los 10 minutos finales (55-54). El retorno de Beliauskas al protagonismo ofensivo y la efectiva presión a saque de fondo rival de los nuestros, con varios balones recuperados, ponían al Obra en el buen camino, aunque Baldwin volvía a equilibrar la situación a falta de 6 minutos (63-63). Ahí aparecía un acertado Ellenson (19 puntos) para añadirse a otros 3 triples de Beliauskas que abrían una ventaja definitiva para amarrar el octavo triunfo del curso. Con este resultado, el Obradoiro salta en la clasificación hasta la decimotercera posición, con un record de 8-15 y una victoria de ventaja sobre el trío que pelea por salir de la penúltima plaza de la tabla.

Partido trascendental para el Obradoiro en Sar ante un Baskonia que llegaba tras una dura semana europea y comenzaba con Baldwin, Giedraitis, Fontecchio, Peters y Costello. El Obra, con el recién fichado Phil Scrubb en la convocatoria, lo hacía con loa habituales Hobbs, Robertson, Thomas Scrubb, Ellenson y Birutis. El partido era muy cerrado desde el inicio, con ambos equipos poco acertados en el tiro y escasa anotación. El Obra tardaba 2 minutos y medio en abrir la lata, con Birutis castigando desde el poste bajo a Costello. La defensa funcionaba bien pero el rebote era un suplicio para los nuestros, que concedían una y otra vez balones extra a un Baskonia fallón en el tiro exterior. Con el marcador funcionando a cuentagotas, Hobbs asistía en el 2x2 a Birutis para la canasta con falta del lituano, que fallaba el libre adicional. Una canasta corta de Thomas Scrubb era el escuálido botín obradoirista ante un Baskonia que tampoco era capaz de superar nuestra defensa más que gracias al rebote ofensivo (7-11). Un triple lateral de Robertson abría un buen parcial para los nuestros, con Ellenson anotando un par de libres y Vicedo aprovechando el pase de Robertson bajo aro para un 7-0 más que interesante (14-11). Ellenson fallaba un triple abierto y dudaba en el ataque siguiente a pesar de estar solo, pero Beliauskas entraba en juego y en su primera acción clavaba un triple. Una canasta del rocoso Giedratis cerraba el primer cuarto con igualdad máxima en la cancha (17-16).

El segundo cuarto comenzaba con el Obra subiendo intensidad en defensa de la mano de Zurbriggen, aunque un afortunado triple de Granger le daba el +4 a los visitantes (17-21). Beliauskas tenía el día inspirado y añadía 2 triples consecutivos para poner al Obra de nuevo por delante, animado por su buen trabajo defensivo que le permitía recuperar balones. Zurbriggen metía un gran pase bajo aro a Vicedo y el Obra cerraba a cal y canto el aro a un Baskonia incapaz de anotar. Una transición fulgurante comandada por Hobbs para el mate de Birutis y otro 2x2 entre base y pivot para la entrada del lituano por el carril central ponían al Obra 8 arriba y forzaban el tiempo muerto de Spahija tras acumular un duro parcial de 12-0 en nada menos que 5 minutos y media de sequía visitante (29-21). La reacción baskonista llegaba de nuevo con el rebote ofensivo y el atasco de los nuestros, con 2 tapones recibidos en sendos ataques (aunque también Ellenson taponaba a Giedraitis). Otro triple de churro, ahora de Giedraitis, cerraba un parcial de 0-9 para el Baskonia (29-30), aunque los nuestros se sobreponían de la mano de Thomas Scrubb, con 4 puntos consecutivos para terminar el cuarto con un ilusionante +3 en el marcador (33-30).

El partido cambiaba tras el regreso de las hostilidades en el tercer cuarto, dejando atrás la sequía anotadora y con ambos equipos encontrando aro con más facilidad. De nuevo Hobbs lanzaba a Birutis para el mate por el carril central del lituano, aunque por los visitantes era Steven Enoch quien aparecía para mantener a los suyos en la pelea. Robertson sacaba petróleo en penetraciones para anotar desde la línea de libres, y por fin aparecía un triple abierto de Ellenson para dar confianza al joven ala-pivot del Obra. Con Enoch monopolizando la anotación baskonista, Robertson volvía a penetrar por la izquierda para anotar un buen 2+1 y Thomas Scrubb bailaba sobre la línea de fondo para dejar una preciosa bandeja que ponía 8 arriba a los nuestros (45-37). A pesar del gran acierto ofensivo de Enoch, ahora con un triple, el Obra mantenía las diferencias con Ellenson en la media distancia y Hobbs desde el triple, aunque la aparición del hasta entonces desacertado Baldwin, con sendas canastas con falta adicional (aún fallando el libre en la segunda ocasión), volvía a apretar el partido. Un nuevo triple de Ellenson y otra buena penetración de Robertson daban aire a los nuestros en el intercambio con un rival que se mostraba más acertado desde el exterior para limar la ventaja obradoirista hasta el mínimo. Un par de buenos triples errados por Ellenson y Beliauskas dejaban todo en el aire al final del cuarto (55-54).

El cuarto período comenzaba con el incisivo Beliauskas anotando 2 libres tras recibir falta en una gran puerta atrás con Zurbriggen. El lituano volvía a anotar a pase del argentino en saque de fondo y despiste defensivo rival, y una forzada canasta de Birutis ante la defensa de Enoch volvía a hacer crecer la pequeña ventaja local. Un agotado Zurbriggen tras su brutal esfuerzo en la presión dejaba su puesto a Hobbs, con el Obra manteniéndose por delante gracias a una buena canasta de Vicedo a pase de Birutis. Baldwin clavaba un triple de 8 metros y Birutis fallaba los 2 libres tras sacarle la cuarta falta a Costello. El base visitante comandaba la reacción baskonista y empataba el partido con 6 minutos por delante (63-63), pero Ellenson se llevaba un vital rebote ofensivo apra anotar bajo aro y salvar el momento complicado. Beliauskas robaba un balón en defensa y, tras un rebote ofensivo de Hobbs y un rápido movimiento de balón, añadía el cuarto triple a su cuenta de la noche. Tras el tiempo muerto visitante el Obra impedía el saque de fondo baskonista y recuperaba el balón, para seguidamente encontrar de nuevo a un inspirado Beliauskas que anotaba otro triple más para lanzar a los nuestros 8 arriba (71-63). Giedraitis respondía desde los 6,75, pero Ellenson solucionaba un complicado 1x1 para anotar una hermosa suspensión "a lo Nowitzky". Con el tiempo menguando, Vicedo se llevaba otro rebote ofensivo decisivo para sacar el balón fuera y Beliauskas sumaba el sexto triple para enloquecer del todo a la caldeira de Sar, y de nuevo Ellenson acertaba en el tiro para poner al Obra 10 arriba a falta de 2 minutos (78-68). Con el partido casi ganado, los nuestros alargaban los ataques mientras seguían forzando pérdidas al rival y sumaban una nueva canasta del mejor Ellenson de la temporada. Todo estaba sentenciado a pesar de los desesperados intentos baskonistas de última hora que solo servían para agrandar artificialmente la enorme diferencia reboteadora en la estadística, y con Sar festejando era Robertson quien certificaba el marcador final con un tiro libre (81-76). La octava estaba en el bolsillo, justo cuando más necesaria era.

Datos a destacar

  • con la soga al cuello, ante un rival históricamente casi inaccesible, el Obra ofreció su versión más consistente, al estilo de tiempos pasados. Trabajo colectivo, defensa sólida, buena lectura de situaciones de juego y colaboración de la rotación sin necesidad de llegar los jugadores importantes exhaustos a los minutos finales. Frente a un rival corto de efectivos y muy castigado por su semana en Euroliga, el Obra llevó el partido a una labor de desgaste, sin conceder opciones fáciles y sabiendo competir sin apagones durante todo el partido
  • enormes problemas para cerrar el rebote, sobre todo de inicio, con nada menos que ¡17 rebotes ofensivos! del Baskonia (algo exagerados en las jugadas finales) para un exagerado 31-47  conjunto. Sin embargo, los nuestros supieron presionar y forzar muchas pérdidas (8-15), especialmente con su presión tras canasta que fue un suplicio para el rival en el último cuarto. El equipo supo evitar las lagunas defensivas habituales (el 1x1 central, a pesar de los intentos de Baldwin) y en ataque tuvo opciones por dentro y por fuera, con posesiones largas y buena lectura de juego
  • y, por supuesto, la rotación. El gran problema de las últimas semanas, el de la casi nula aportación de la segunda unidad, desapareció con la buena aportación de los no titulares, que consiguió que el equipo no sufriera ningún bajón apreciable durante los 40 minutos de juego. Curiosamente sin el concurso de Muñoz, Okouo y Oliver, con solo 8 jugadores en acción (y la aportación todavía muy testimonial de Phil Scrubb), el trío de reserva (Zurbriggen, Vicedo y por supuesto el estelar Beliauskas) rindió a gran nivel y permitió ir rotando jugadores sin que el equipo llegara agotado a los minutos finales (ningún jugador superó los 27 minutos y medio en cancha, algo inaudito desde hacía muchos partidos)
  • LAURYNAS BELIAUSKAS: su mejor partido con el Obra llegó en un momento crucial. El lituano acertó en su primer tiro nada más saltar a cancha y a partir de ahí fue encadenando acciones positivas. No solo su espectacular día en el tiro (¡6 de 8 en triples!), sino su trabajo defensivo, su buena lectura en ataque para buscar triangular con Birutis, convirtieron al escolta lituano en el protagonista máximo de la victoria, marcando sus records personales en ACB en puntos, triples y valoración. 22+3+1+2 en 20 minutos, para 22 de valoración
  • BRAYDON HOBBS: no estuvo muy acertado en el tiro (solo un triple anotado en el tercer cuarto), pero su conexión letal con Birutis nos regaló varias canastas de impresión. Ayudó mucho a cerrar el rebote defensivo tras los problemas del inicio, movió al equipo con solvencia y estuvo listo para saltar al robo en media cancha. En el 1x1 defensivo aguantó más o menos bien el empuje de Baldwin y supo manejar el juego sin pérdidas ni regalos al rival, completando una actuación seria y sólida. 3+5+7+2 en 27 minutos, para 11 de valoración
  • KASSIUS ROBERTSON: no tuvo su día más acertado en el tiro (1 de 4 triples, 3 tapones recibidos), pero fue importante en el tercer cuarto para buscar sus penetraciones y ayudar al equipo a estirar la goma en el marcador. La gran actuación de Beliauskas le permitió llegar fresco al tramo final, aunque la ventaja del equipo no le obligó a tener que jugarse tiros decisivos en esta ocasión. Como siempre, buenos balones a los interiores en su cuenta. 11+2+3 en 25 minutos, para 7 de valoración
  • THOMAS SCRUBB: no estuvo tan brillante como en otras ocasiones, sin acierto desde el triple y teniendo dificultades para irse al poste bajo ante un rocoso Giedraitis, pero mantuvo su habitual tono de trabajo oscuro y efectivo (buena ayuda en el rebote) en la cancha sin necesidad de jugar una minutada. Enorme de nuevo para dejar un canastón remontando por línea de fondo, algo que ya se ha convertido en marca de la casa. 8+5 en 26 minutos, para 7 de valoración
  • HENRY ELLENSON: junto con Beliauskas, el otro gran protagonista del triunfo. No comenzó bien en ataque, dubitativo en el tiro, aunque haciendo un correcto trabajo en defensa (no tanto en el rebote). Sin embargo, tras entrarle por fin un triple en el tercer cuarto, ganó en autoconfianza y volvió a sacar a relucir esa calidad que llevábamos mucho tiempo sin poder vislumbrar. Buenas canastas bajo aro, de media distancia y otro triple más, apareciendo además en momentos complicados (cuando Baldwin había vuelto a empatar a falta de 6 minutos), asumiendo balones calientes con acierto en el tramo final del encuentro. A este nivel el equipo gana muchísimo. 19+4 en 27 minutos, con 4 faltas provocadas, para 17 de valoración
  • LAURYNAS BIRUTIS: partido sólido del lituano, vencedor en su duelo con Costello y letal en su conexión con Hobbs entrando por el carril central como un cohete. El lituano intimidó atrás en las ayudas, generó los habituales problemas a la defensa rival en la pintura y, en su debe, sufrió con un Enoch más veloz que él y tuvo un mal día en la línea de libres (0 de 3). Bien a nivel físico, sin tener que exprimirse gracias al buen reparto de minutos del equipo. 12+4+2 en 26 minutos, con 5 faltas provocadas, para 13 de valoración
  • EDGAR VICEDO: buenos y muchos minutos del madrileño en el partido, apareciendo en ataque para sumar bajo aro y trabajando a buen nivel atrás, en ayudas y cerrando huecos. Se le ve muy integrado ya en la dinámica del equipo y jugando a este nivel permite rotar a los interiores sin que el nivel se resienta. Llamativo +8 con él en cancha, el máximo del equipo. Hizo un poquito de todo y casi todo bien. 6+2+1 en 26 minutos, para 8 de valoración
  • FERNANDO ZURBRIGGEN: pocos minutos pero muy buenos. El argentino jugó posiblemente a su mejor nivel de la temporada en su aparición en la primera mitad, sin atascarse demasiado en la dirección y mostrando su energía e intensidad máximas en defensa. Tras el descanso volvió a tener una corta pero efectiva intervención entre el tercer y el cuarto período, muy listo para asistir a sus compañeros y vaciándose en defensa hasta la extenuación. El equipo agradeció mucho su trabajo en unos minutos que permitieron descansar a Hobbs sin los agobios de otras ocasiones (positivo +5 con él en cancha). 0+2+5 en 13 minutos, con 3 pérdidas, para 4 de valoración
  • PHIL SCRUBB: debutó con el Obra sin acierto en algún triple abierto pero manteniendo una buena intensidad en sus pocos minutos en la cancha. Se le ve bien a nivel físico y tiene que ser un jugador interesante en próximas jornadas para alargar la rotación, a poco que vaya entrando en el equipo. Estadística a 0 en 9 minutos, para -3 de valoración
Gran victoria del Obradoiro, ante un rival de Euroliga que no perdía en Sar desde 2013 y en un momento en el que las apreturas clasificatorias eran máximas. Con nada menos que 6 equipos encajados en apenas una victoria de diferencia y el Betis, colista, a tan solo 2 del duodécimo Unicaja, el valor de este triunfo es enorme para los nuestros, además por la forma en que se ha conseguido: desde el trabajo coral en ataque y en defensa. El partido del próximo sábado, de nuevo en Sar ante un decepcionante Unicaja que llegará muy exigido, puede ser la piedra de toque que permita al equipo dar un impulso de gigante hacia el objetivo de la permanencia, ante una afición que en cuanto ha recibido la energía perdida en meses pasados ha vuelto a ayudar en los malos momentos. En esta temporada tan igualada que provoca altos y bajos emocionales de semana en semana, al Obra le tocan unos días de optimismo para preparar ese decisivo partido ante los malagueños.


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