Deberes hechos (79-93)

(foto: ACB Fotoclick)

El Obradoiro cumplió con la primera parte de su objetivo y consiguió una holgada victoria en Valladolid que le permite llegar todavía con posibilidades de playoff a la última jornada. El Obra rompió el partido en el primer cuarto, con un Salah Mejri imparable que destrozó a los locales por completo (8+7 en menos de 9 minutos en la cancha). Los nuestros cerraron el cuarto con un triple de Hummel que los ponía 16 arriba (10-26), y a partir de ahí siguieron aumentando un poco más las diferencias hasta el +20 del descanso (30-50). El Obra siguió gestionando tan gran ventaja durante el resto del partido, llegando al +25 tras un par de triples seguidos de Corbacho (42-67), pero los locales quisieron dejar buen sabor de boca a su afición y con un gran Nacho Martín al frente (21+7 para 25 de valoración) continuaron peleando hasta ponerse a solo 11 puntos (68-79) tras una jugada de 6 puntos con falta y técnica incluidas. Sin embargo, el Obra volvió a ponerse las pilas de mano de Kendall y cerró el partido sin mayores problemas (79-93). La colosal actuación de Mejri (20+15 en 19 minutos, algo inédito en la historia de la ACB) fue lo más destacado de los nuestros, aunque también rindieron a buen nivel Corbacho (17 puntos con 5 triples), Robbie Hummel (15+2), Kendall (13+5) y el serio trabajo de Andrés (9+1+3+2) y Pumprla (6+6+2+2). Con este triunfo, el Obradoiro deja su record histórico de victorias nada menos que en 17, y queda a la espera de una última jornada en que Sar vivirá la tensión de poder cumplir el sueño: para ello, el Obra deberá vencer al Bilbao y esperar el tropiezo de Unicaja y/o Gran Canaria (si empata solo con este último tendría que remontar también un -16 que tiene de ventaja el equipo canario en el basketaverage general). La ilusión sigue intacta.