Si algo ha caracterizado el juego del Obradoiro desde la primera a la última jornada ha sido la defensa. Mejor equipo defensivo de la competición (fantásticos 65 puntos encajados por partido), el equipo ha tenido momentos de un nivel defensivo espectacular. Cuando los partidos se ponían difíciles, la defensa propiciaba remontadas espectaculares, y solo en momentos muy esporádicos ha sido fácil anotarle puntos al Obradoiro (la racha de triples de La Palma o el juego muy abierto de Huesca). Para conseguir esa intensidad defensiva, ha sido clave contar con una rotación amplia de jugadores que permitiera mantener un nivel físico tan exigente. El Obradoiro no ha realizado experimentos zonales en toda la temporada, y casi nunca ha tenido problemas para frenar a los ataques rivales. Solo ha sufrido en momentos puntuales con equipos muy abiertos, y jugando como visitante: Huesca, Tarragona y los dos equipos canarios plantearon partidos (en sus respectivas canchas) sin referencias interiores claras, de correr y tirar y de escasos 5x5, forzando al Obradoiro a jugar de otra forma distinta a la habitual. Todo ello, unido a días especialmente aciagos en el tiro, llevaron a 4 derrotas. El caso del Autocid es distinto, pues los de Casadevall jugaron a lo mismo que el Obradoiro: defensa por encima de todo, ataques controlados y marcadores bajos. Con esas armas consiguieron colapsar el ataque obradoirista, a base de múltiples recursos tácticos, aprovechando además unos porcentajes de tiro excepcionalmente bajos de los nuestros.
En ataque sí ha habido más problemas en ciertos momentos, destacando como quedó dicho antes las enormes dificultades para superar la defensa del Autocid burgalés en los dos partidos entre ambos equipos. La segunda unidad ha tenido un ataque bastante espeso en muchas ocasiones, muchas veces reducido al acierto individual en el tiro exterior de Alberto Corbacho, aunque en general el equipo ha sabido encontrar soluciones en la mayoría de las ocasiones. El juego interior ha sido quizás el mejor de la competición, con Oriol Junyent a un gran nivel y Hopkins (cuando ha estado bien físicamente) y Kendall (con cierta irregularidad) apoyando al catalán en la anotación. Por fuera, los especialistas en el tiro, Bulfoni y Corbacho, han sido muy importantes para abrir las defensas contrarias, y de hecho cuando ambos han tenido un mal día al mismo tiempo es cuando el conjunto ha sufrido más en ataque. En cuanto a la dirección, Andrés Rodríguez ha sido probablemente el mejor base de la temporada regular, con una dirección casi siempre acertada y una gran visión para aprovechar los robos defensivos y las transiciones. Sus suplentes, Sánchez y Nguema, non ha sabido mantener el nivel ofensivo del portorriqueño, aunque en defensa han aportado en positivo al equipo en muchas ocasiones.
Hay un dato que conviene resaltar de entre todos los que ha ofrecido este semestre de competición: el Obradoiro solo ha perdido cuando ha tenido un día realmente malo. En otras palabras, en las derrotas del equipo se ha tenido que dar una conjunción de problemas (sobre todo en ataque) poco habitual, mientras que muchos partidos se han ganado sin tener que demostrar un nivel especialmente alto en el juego. Efectivamente, si comprobamos las estadísticas del equipo en las derrotas, se ve claramente que dichas derrotas se han dado en partidos especialmente aciagos del equipo:
- 28 victorias: 55,2% T2, 38% T3, 74% TL, 78,9 pts. a favor, 62,1 pts. en contra
- 6 derrotas: 45,3% T2, 26% T3, 62% TL, 66,8 pts. a favor, 75,7 pts. en contra
EL Canarias se sale un poco del perfil de Tarragona, Huesca y La Palma porque en este caso sí tiene gente válida en la pintura capaz de hacerte frente en esta faceta, aunque en Tenerife nos hayan ganado con el tiro exterior....pero lo cierto es que los equipos "anárquicos" que basan su poder ofensivo en el tiro exterior, ràpidos en la pista, se nos han atragantado cuando no hemos tenido nuestro día en ataque. Son precisamente los equipos que cuando no están acertados pueden llegar a perder de diferencias escandalosas.
ResponderEliminarEn fin, el Cáceres es un equipo que nos va en este sentido por lo que no cabe este razonamiento en caso de derrota. La victoria en el primer partido es capital porque las estadísticas dicen que el que gana el primero gana el play off. Que así sea. Nos vemos allá.