Sar sufrió lo indecible en el inicio de los playoffs por el ascenso a ACB. El rival, fuerte, con calidad y experto, llevaba semanas preparándose, y salía a la cancha con su mejor 5 en estos momentos: Cherry, Xavier, Sánchez, Antelo y McCoy. Por parte local, los clásicos Andrés, Tuky, Deron, Levon y Oriol. El comienzo del partido era frenético, con ambos equipos muy acertados en ataque y sin protagonismo alguno para las defensas. Antelo clavaba un par de triples abiertos para dar las primeras ventajas a los suyos (8-14), pero un acertado Bulfoni replicaba con acierto desde la media y la larga distancia (10 puntos en el cuarto). Junyent sufría para superar a McCoy, Cherry y Francis Sánchez también aportaban en ataque, y el partido se iba a un tanteador alto que iba en contra de los intereses obradoiristas. En apenas 12 minutos de reloj el cuarto se ventilaba (sin tiempos muertos ni apenas interrupciones) con un equilibrado 24-25.
La entrada de la segunda unidad presagiaba una mayor intensidad defensiva, pero lo cierto es que los visitantes seguían muy acertados en ataque y las cosas empezaban a verse más oscuras. Miqui Feliu anotaba dos buenos triples y Corbacho el primero que intentaba, aunque a partir de ahí iba a perder la puntería durante los minutos siguientes. Ruffin reboteaba en ataque pero fallaba bajo el aro, mientras que por los visitantes Xavier despertaba con un par de buenos tiros y Antelo se apuntaba su tercer triple de la noche. El partido seguía más o menos igualado (38-37), pero en los 2 últimos minutos los extremeños lograban un doloroso parcial de 0-10, coincidiendo con la vuelta a cancha de los titulares del Obra. Con 9 abajo en el marcador se llegaba al descanso (38-47), con muchas caras de preocupación en grada y vestuario.
Tocaba remontada en la segunda mitad, como tantas otras veces. Sin embargo, el Cáceres salía en tromba y se apuntaba un parcial de 2-7 en un visto y no visto (1 minuto y 16 segundos), gracias a un gran Cherry, que obligaba a Moncho Fernández a pedir un tiempo muerto casi desesperado, con el equipo 14 abajo (40-54). Ese minuto era el momento elegido por la afición para levantarse y levantar al equipo, y de nuevo el milagro se comenzaba a hacer realidad en la caldeira de Sar. La defensa empezaba a robar balones poco a poco, las canastas iban cayendo lentamente en el aro cacereño y las distancias se iban reduciendo minuto a minuto. En el resto del cuarto los visitantes anotaban únicamente 8 puntos, con fallos en los tiros libres y una cierta sensación de miedo a perder. Por parte local, un triple inicial de Bulfoni daba paso a unos buenos minutos de Hopkins y Kendall, que llevaban el marcador a un final apretado sin remisión. Con un ajustado 57-62 concluía el tercer cuarto, mientras la grada se desgañitaba para llevar en volandas al equipo.
Con los menos habituales en cancha, para dar descanso a los titulares, comenzaba el último cuarto del partido. La defensa mantenía un alto nivel, con un enorme Miqui Feliu, y solo Cherry parecía tener las ideas claras para mantener la anotación de los suyos, aunque lastrado por las personales. Pero ante todo y sobre todo, este era el momento de Alberto Corbacho. El mallorquín se echaba al equipo a las espaldas y comenzaba a desatascar los complicados ataques locales a base de triples. La remontada estaba ya al alcance de la mano, aunque un último arreón de los extremeños, con 2 canastas consecutivas (con un gran mate de McCoy sobre Feliu incluido) lo atrasaba hasta entrar en los últimos 5 minutos. Ahí aparecía de nuevo Corbacho para robar un balón y marcharse en solitario para machacar el aro visitante y poner al Obra arriba por fin (71-70). Aranzana paraba el partido a falta de menos de 4 minutos, pero ya era momento de ir a cara o cruz. La tensión era máxima, y McCoy y Cherry desperdiciaban oportunidades de tiros libres, mientras que tampoco Junyent se libraba del correspondiente fallo desde los 4.80. Ya entrando en el último minuto, Francis Sánchez se sacaba de la manga un enorme triplazo a la media vuelta con el defensor encima que parecía casi definitivo (75-78), pero de nuevo Corbacho acudía al rescate para cerrar su increíble último cuarto (18 puntos) con otro triple para empatar a 78. Una buena defensa daba la última (se suponía) posesión a los locales, pero una falta de Cherry llevaba a Andrés Rodríguez a la línea de tiros libres a falta de 8 segundos. El boricua anotaba únicamente el primero, dejando a los cacereños la última opción para vencer. Sin embargo, el tiro frontal de Humphrey desde 6 metros no entraba y el Obradoiro se apuntaba un agónico triunfo para encarrilar la serie ante una grada enfervorizada que festejaba la victoria con una mezcla de alegría y alivio. 79-78 para comenzar. ¿Quién dijo que iba a ser fácil?
Datos del partido
- no hubo lleno, sin duda por ser viernes y por las dificultades para conseguir las entradas, pero de nuevo Sar fue pieza fundamental y casi decisiva para conseguir el triunfo
- el Obradoiro se olvidó de la defensa durante toda la primera mitad. Jugando a meter puntos, ante un rival con mucha calidad y acierto, el equipo estuvo a punto de naufragar por no recordar sus señas de identidad. El tiempo muerto de Moncho, con 14 abajo, lo cambió todo
- en 21 minutos se habían encajado nada menos que 54 puntos. En los 19 siguientes, se encajaron 24. Ese dato explica en gran parte lo que fue el partido: de nuevo la defensa obró el milagro. Sin embargo, este tipo de remontadas no deberían ser lo habitual, por mucho que esta vez (de nuevo) el final fuera feliz
- el Cáceres estuvo muy bien hasta que las cosas se pusieron duras. A partir de ahí no supieron sobreponerse a la situación, regalando tiros libres en cantidad y siendo incapaces de encontrar soluciones en ataque. Sin duda, en sus mentes tiene que pesar la idea de que han desperdiciado una oportunidad única de sacar tajada en Sar
- ALBERTO CORBACHO: enorme último cuarto del mallorquín, convertido en la casi única referencia ofensiva del equipo. 18 de los 22 puntos del equipo en esos minutos salieron de sus manos, en una nueva demostración de puntería y sangre fría. Imprescindible en la victoria final. 21+2, con 5 triples, para 19 de valoración
- ANDRÉS RODRÍGUEZ: no tuvo su mejor día, superado en muchas ocasiones por Cherry, pero aún así estuvo en el momento clave para anotar su único punto del partido. Por momentos pareció algo cansado, pero en el último cuarto su trabajo atrás fue tan intenso como siempre. Desacertado en el tiro (0 de 5). 1+2+9+1 para 6 de valoración
- TUKY BULFONI: el mejor en ataque en la primera mitad, acertado en el tiro y muy activo. Se vació en el tercer cuarto para comenzar la remontada y después no volvió a cancha dado el rendimiento de Corbacho. 13+1, con 3 de 4 en triples, para 5 de valoración
- DERON WASHINGTON: interesante duelo el que mantuvo con Francis Sánchez, posteándose mutuamente en ocasiones. Irregular en el tiro, le faltó un poco de cabeza fría en algunos momentos. El gran trabajo de Feiu tampoco le permitió saltar a cancha en los minutos finales. 8+1, con 5 faltas provocadas, para 7 de valoración
- LEVON KENDALL: lo pasó mal de inicio con el acierto exterior de Antelo, sufriendo además algunos problemas con las faltas. Aprovechó bien sus opciones en ataque, a pesar de perder algún balón por pasar demasiado en vez de tirar. Mucho mejor en la segunda mitad. 12+3+2 para 10 de valoración
- ORIOL JUNYENT: se le vio espeso físicamente por momentos, pasándolo mal para anotar sus canastas habituales. Aún así, supo aportar buenos números, sobre todo en el apartado reboteador, aunque no supo alcanzar el nivel de otras ocasiones. 9+9+1+2, con 5 faltas provocadas, para 15 de valoración
- MIQUI FELIU: aportación fundamental del alero catalán, con una defensa sacrificada y al límite en la remontada final. Además anotó un par de triples en el segundo cuarto. Acabó en cancha en los minutos decisivos, lo que acredita su gran actuación, más allá de los fríos números. 6+3+1 para 1 de valoración
- BERNARD HOPKINS: otro de los fundamentales. Supo sacar petróleo bajo el aro cacereño (enorme canasta a una mano con Antelo agarrándolo del otro brazo) y ayudó al equipo en los peores momentos. Con Hopkins en positivo el equipo gana mucho. 9+5+2, con 5 faltas provocadas y 1 tapón, para 17 de valoración
- ERIC SÁNCHEZ: le faltó acertar en los tiros abiertos que tuvo (0 de 3 en tiro), pero defendió fuerte y no cometió errores en el control de balón. 0+1+3 para -1 de valoración
- MICHAEL RUFFIN: reboteó en ataque en el segundo cuarto, aunque por contra falló 2 canastas de las que solo él puede fallar. Trabajador pero menos importante que en otras ocasiones. 0+4 (los 4 en ataque) para 1 de valoración
Estadísticas oficiales del partido
Próximo partido
Blu:Sens Monbús - Cáceres Creativa. 1/4 final playoffs LEB Oro, 2º partido. Fontes do Sar. Domingo, 1 de mayo, 19:00 horas
Os vaticinios de Juani volveron cumprirse. Agónica vitória nun partido horrible (un máis e van varios) do Obradoiro, no que os arreóns e a épica volveron funcionar, pero que algún día pode non funcionar.
ResponderEliminarVexo mal a Eric, regular tirando a mal a Andrés (errando tiros que non acostuma e outros que nin tocaron aro), aloucado a Washington e sin comentarios a Rufino (o de recibir no poste e irse ós 6.75 debe formar parte dos intanxibles).
O mellor por suposto a vitória e esa capacidade infinita de sufrimento. O peor, a sensación de que eu xa vin este mesmo partido varias veces, e algún día a moeda pode caer cruz.
Xa que logo qué pasa con Nguema?. Castigo pola famosa técnica de La Palma?
La parte buena del partido es que a partir de ahora, con la dinámica de la competición, se van a dejar los nervios al margen.Estoy seguro de que el domingo el partido va a ser distinto y no serán los nervios sino el juego de uno u otro el que decida.
ResponderEliminarHe visto a McCoy grandísimo (parecía un tipo de 2,15 en la pintura)y a Humphries no se le ha visto tanto la cojera como en el último enfrentamiento en Sar. Estos dos son los que me preocupan porque cuando no rinden su equipo se viene abajo.
Cherry, sin duda el mejor jugador del partido, cometió un error que no le perdona su entrenador, con una falta de tiro a Andrés a 8 metros de la canasta y faltando 5 segundos. Quizá en esta jugada estuvo la clave de nuestra victoria.
Nos hemos olvidado de defender en la primera parte y el horizonte debe ser siempre la regularidad en esta faceta porque así es como se va delante en el marcador, no al remolque como ha sucedido ayer.
Coido que o de onte era un partido de moitos nervos e o único que se podía pedir e desexar era sacalo adiante. Estou seguro que o domingo veremos un partido diferente e arríscome a aventurar unha vitoria máis cómoda. De ser así, seguramente nos aforraremos os cinco partidos. A plantilla agradecerá todo o descanso que se poida tomar, seguro. Forza Obra!!
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