lunes, 5 de febrero de 2018

Ocasión perdida (93-87)

Bendzius y Pozas con Gary Neal (foto: ACB FotoClick)

El Obradoiro no pudo aprovechar su visita a un apurado Zaragoza y perdió en un partido muy igualado que se decantó del bando local en el último cuarto. Los de Moncho Fernández comenzaron bien, con Thomas y Pustovyi castigando la defensa zaragozana (5-11), pero el gran trabajo de un Gary Neal decisivo durante todo el partido (36 puntos y 33 de valoración al final, MVP de la jornada) consiguió equilibrar el marcador al final del primer cuarto (23-23). El Obra se escapó en el segundo cuarto gracias al gran acierto desde el triple, alcanzando mediado el periodo una máxima renta de 8 puntos (32-40), pero tras la lesión en el hombro de Pozas llegó la irrupción de Bo McCalebb en el partido, rompiendo con facilidad una y otra vez la defensa obradoirista, que cambió la dinámica y permitió a los locales ir por delante al llegar al descanso (47-44). El Obra siguió manteniendo sus opciones tras el paso por los vestuarios, siempre de la mano de Matt Thomas (22 puntos al final), pero sin conseguir parar en casi ningún momento al omnipresente Gary Neal, que en el último cuarto tomó las riendas del partido y lanzó a los suyos a por la victoria a pesar de los intentos infructuosos desde el triple por parte obradoirista. Con esta derrota por 6 puntos (que iguala el +6 de la ida en Sar), el Obradoiro se queda con un record de 9-10 en la undécima posición, a 2 triunfos de zona de playoffs y con 5 por encima de los puestos de descenso.


Visita del Obradoiro a una de sus canchas malditas para enfrentarse a un Zaragoza con relevo en el banquillo y muchas urgencias. Los locales comenzaban el partido con McCalebb, Neal, Barreiro, Suárez y Varnado, mientras el Obra lo hacía con los habituales Pozas, Thomas, Bendzius, Radovic y Pustovyi. Radovic posteaba con calidad sobre Suárez para abrir el marcador, mientras Matt Thomas mostraba su gran muñeca para clavar el primer triple y una preciosa suspensión lateral de 5 metros. El Obra corría en transición, pero también sumaba pérdidas en ataque que le impedían tener continuidad en el juego. Aún así, una buena canasta tras rebote ofensivo de Pustovyi le daba a los nuestros un interesante +6 (5-11), aprovechando las muchas dudas del ataque local. Neal desde el triple y McCalebb con sus penetraciones sacaban su calidad para mantener a Zaragoza en el partido, aunque de nuevo Pustovyi aparecía en un gran alleyoop lanzado por Pozas y Bendzius corriendo al contraataque le daban puntos a los nuestros. Radovic neutralizaba el segundo triple de Neal con otro acierto desde los 6,75, pero el Obra se contagiaba cada vez más del juego a tirones y sin demasiado control de los locales, siempre dependiendo de la calidad individual de un Gary Neal que lo hacía todo y ya llevaba 11 puntos en su zurrón. La defensa concedía segundas opciones a los locales, bien aprovechadas por De Jong, aunque el recién incorporado Sàbat anotaba un triple en medio de un enredado ataque. Un par de libres de Matt Thomas eran la última anotación en el cuarto de un Obra que mantenía la igualdad en el marcador aunque sin acabar de dar demasiado buenas sensaciones (23-23).

De Jong continuaba sumando en ataque para los suyos al inicio del segundo cuarto ante la inocencia defensiva de Spires, aunque Llovet respondía con un gran 2+1 posteando a Dragovic. Un triple de David Navarro sobre el límite de posesión abría la veda desde los 6,75 para los nuestros. Corbacho clavaba otro más tras salir de bloqueo, aunque la defensa seguía sin ajustarse del todo. El runrun en la grada iba en aumento a pesar del tercer triple de Neal, lo que iba aprovechando el Obra para aumentar su ventaja en un festival de intentos desde el triple del que sacaban réditos gracias a uno de Sàbat y otro más de Corbacho (32-40). Los locales estaban totalmente desconcertados y su afición comenzaba a presionarlos, pero a los nuestros les seguía faltando solidez y la vuelta a la carga de Gary Neal con otro triplazo a la carrera volvía a equilibrar el marcador poco a poco. Pepe Pozas regresaba a la cancha y casi al instante se lesionaba un hombro para ya no volver más al juego, y McCalebb descubría un filón en la defensa de Sàbat para forzar una penetración tras otra anotando y asistiendo. Bendzius hacía todo bien menos dejar el balón en la canasta y el parcial local seguía aumentando a pesar de una gran penetración de Matt Thomas, que poco después erraba 2 tiros libres, con McCalebb de protagonista total en la cancha con sus puntos y sus pases a Triguero. El 15-4 hasta el final del cuarto daba la vuelta al partido y otorgaba a los locales una ventaja de 3 puntos al llegar al descanso (47-44).

El tercer cuarto comenzaba con David Navarro de base ante la lesión de Pozas y Laksa por primera vez en la cancha. El Obra salía fuerte, con Radovic anotando tras un gran rebote de ataque y Matt Thomas castigando desde el triple (47-49). Neal parecía incómodo por primera vez en el partido ante la defensa de Laksa, aunque Radovic era demasiado blando y veía cómo McCalebb le robaba la cartera en propio aro para seguidamente recibir un tapón de Varnado en el contrario. En un visto y no visto, el 7-0 local liderado por McCalebb era cortado por una buena penetración de Navarro, y de nuevo Thomas desde el triple devolvía el equilibrio al marcador. Varnado en penetración y Pustovyi tras rebote ofensivo intercambiaban canastas, del mismo modo que Radovic y una vez más Neal lo hacían desde el triple. El Obra comenzaba a tirarse el partido a triples cada vez más claramente pero sin el acierto necesario, y el partido se mantenía en el alambre sin que nadie consiguiese hacerse con el mando en la cancha. Por fin Sàbat jugaba un buen pick and roll para el mate de Pustovyi, aunque Bellas le contestaba con un triple que también al instante era neutralizado desde los 6,75 por Laksa. Un par de libres de Thomas le daban al Obra 2 puntos de ventaja (64-66), pero a pesar de la defensa zonal de los nuestros una suspensión lateral y una bandeja al contraataque de Michalak le daban ventaja a Zaragoza al llegar al final del cuarto (68-66).

Con el Obradoiro cada vez más atascado en ataque, al menos la zona 3-2 parecía complicar la ofensiva local y 3 tiros libres de Corbacho tras forzar la falta en un intento triple devolvían la delantera de forma efímera a los nuestros (68-69). Neal regresaba a la pista tras un breve descanso y el partido cambiaba definitivamente de color. El norteamericano rompía una y otra vez la defensa con sus penetraciones y daba inicio a un parcial de 9-0 apoyado por el trabajo de Varnado en ambos aros sobre un blando Pustovyi y culminado con un 2+1 en penetración de 1 contra todos del omnipresente alero local (77-69). El Obra fallaba canastas hechas, con especial protagonismo de un Bendzius sin suerte, aunque un triple de David Navarro cortaba la sangría por unos segundos. El intercambio de tiros libres y un par de defensas exitosas permitían que un triple del retornado Matt Thomas devolviera al Obra a la batalla (80-78). Corbacho hacía un tiro desde los 6,75 para poner al equipo por delante y Navarro no atinaba para meter bien el balón en alleyoop a Pustovyi, pero era el canto del cisne. Neal reclamaba todo el protagonismo para sí y salvaba a los suyos con otro triple más y el Obra encadenaba varios ataques espesos y baldíos mientras el reloj iba descontando minutos y los locales iban sumando desde la línea de libres. Bellas asumía las riendas en la cancha y Zaragoza se iba ya de 10 puntos para sentenciar prácticamente el partido a falta de poco más de 2 minutos (88-78). El Obra iba ya a la desesperada pero se estrellaba con el desacierto desde la línea de triple, aunque aprovechaba los errores locales para acercarse en el marcador y entrar en el último minuto solo 6 abajo (88-82). Neal era por enésima vez el líder de los suyos para anotar una bandeja casi definitiva, y a pesar del último triple de Corbacho y los postreros esfuerzos obradoiristas ya no había nada que hacer. El Obra caía por 6 puntos y desaprovechaba la ocasión de dejar casi vista para sentencia la salvación ante un rival que encontraba un balón de oxígeno para salvarse de la quema (93-87).

Datos a destacar

  • partido extraño del Obradoiro, que casi nunca tuvo continuidad en el juego pero sin embargo estuvo en la pelea casi hasta el final. El Zaragoza estaba muy exigido y acabó contagiando a los nuestros de sus necesidades, y ahí la calidad individual de un inmenso Neal hizo la diferencia en los minutos finales, los únicos en los cuales se desequilibró el marcador
  • 31 tiros de 2 por 37 de 3: el Obra abusó del triple especialmente en la segunda mitad, sin apenas meter balones dentro; además, los que sí se metieron tuvieron unos porcentajes de acierto bajísimos (apenas 11 canastas de 2 del Obra, horrible 35% en tiros de 2). En un partido tan igualado, esas canastas falladas bajo el aro rival fueron decisivas para la derrota
  • el partido fue de Gary Neal. Sin apenas minutos de descanso, el estadounidense nos destrozó desde el triple (6 de 9 triples), en penetraciones y forzando faltas (¡8 faltas recibidas!). Solo en el tercer cuarto se consiguió frenarlo un poco con la defensa de Laksa, pero los 36 puntos del 13 local fueron determinantes para el triunfo de los suyos. Con las ayudas de McCalebb en el segundo cuarto y de Bellas en los minutos finales (59 de los 93 puntos del equipo entre los 3) fue suficiente para que Zaragoza amarrase la victoria
  • MATT THOMAS: buen partido del estadounidense, uno más en la temporada. Acertado desde el triple (4 triples con 50% de acierto), apareciendo en momentos oportunos para asumir la responsabilidad e incluso yendo a cerrar el rebote con acierto. En defensa sufrió en algún momento con emparejamientos desfavorables, pero mantuvo el tipo con decoro. 22+6 en 28 minutos, con 6 faltas provocadas, para 23 de valoración
  • PEPE POZAS: su participación en el partido estuvo reducida a los primeros minutos, en los cuales mantuvo el tipo atrás con McCalebb y llevó las riendas con corrección. Justo al regresar al juego en el segundo cuarto se lesionó un hombro y ya no pudo regresar. 0+2+2 en 8 minutos, para 1 de valoración
  • EIMANTAS BENDZIUS: trabajó a destajo pero con un desacierto tremendo en ataque (1 de 7 en tiros de campo), fallando canastas increíbles a corta distancia y enredándose en acciones estériles. De esos partidos del lituano que llegan a ser desesperantes y dejan opacado su esfuerzo en defensa y su labor para el equipo. 6+2+1 en 17 minutos, para 5 de valoración
  • NEMANJA RADOVIC: un par de buenas acciones bajo el aro no son suficientes para un partido en el que se empeñó en lanzar triples (2 de 4 al final, pero quizás no era ahí donde más daño podía hacer al rival). Fue bien al rebote en ambos aros pero le faltó algo de contundencia en más de una ocasión, alternando cal y arena durante todo el partido. 12+8 en 24 minutos, para 12 de valoración
  • ARTEM PUSTOVYI: apariciones fugaces para machacar el aro rival, pero también algo de blandura para frenar al intenso Varnado, que le incomodó mucho en defensa y le hizo daño en ataque. Con la zona 3-2 estuvo más resguardado y no tuvo que salir a los flashes lejanos, pudiendo cerrar mejor el rebote, pero tampoco acabó de ser constante en la cancha durante todo el partido. 12+7 en 33 minutos, con 3 balones perdidos, 2 tapones y 4 faltas provocadas, para 11 de valoración
  • DAVID NAVARRO: base de emergencia tras la lesión de Pozas, el valenciano cumplió con corrección en la segunda mitad, parando bien a McCalebb aunque sin acabar de manejar bien el ataque del equipo. Le faltó conectar con los interiores de forma clara, aunque estuvo acertado en el tiro (2 triples sin fallo) y tiró del carro hasta el final. 11+0+4+2 en 22 minutos, para 11 de valoración
  • ALBERTO CORBACHO: un par de buenos triples suyos lanzaron al Obra en el segundo cuarto, pero después el balear no volvió a encontrar aro en sus intentos del último cuarto, algunos de ellos a la desesperada en finales de posesión (3 de 11 triples al final). En defensa, con la zona 3-2 de la segunda mitad, estuvo correcto y activo. 12+3 en 17 minutos, para 8 de valoración
  • ALBERT SÀBAT: otro partido gris del catalán, con dificultades para dirigir el ataque y enormes problemas atrás ante un McCalebb que lo masacró en un horrible final del segundo cuarto. Anotó un par de triples pero se empeñó en lanzar tiros lejanos en vez de buscar otras opciones y solo encontró buenos pases interiores con cuentagotas. 6+2+7 en 17 minutos, para 7 de valoración
  • NACHO LLOVET: lastrado por las faltas, casi nunca encontró su sitio en la cancha. Un gran 2+1 en el poste fue su única contribución directa positiva en ataque, mientras atrás no llegó a ser el de otros días ante un rival que jugaba a rachas y sin referencias ofensivas por dentro. 3+2+1 en 16 minutos, con 4 faltas provocadas, para 3 de valoración
  • MARTINS LAKSA: apareció tras el descanso con la clara misión de frenar a Neal y lo consiguió (Neal anotó solo 3 puntos en el tercer cuarto), vaciándose en la cancha y apretnado a la estrella local. En ataque ayudó con un triple aunque no apareció demasiado. 3+1 en 10 minutos, para 2 de valoración
  • NICK SPIRES: floja actuación del sueco, sin aportar en ataque y muy inocente en defensa. Se cargó otra vez de faltas a ritmo de record. 0+1 en 5 minutos, para -5 de valoración
  • BEN SIMONS: apenas un par de minutos en la cancha en los malos momentos previos al descanso, sin influencia en el juego y estadística a 0
El Obradoiro tuvo una gran oportunidad de conseguir la décima victoria de la temporada y dejar casi definitivamente relegado a un rival directo por la salvación, pero no tuvo un buen día y casi en ningún momento llegó a alcanzar un nivel adecuado y sobre todo constante para conseguirlo. El partidazo de un Gary Neal que se puso la capa de superhéroe para salvar a los suyos de la quema acabó siendo suficiente para derrotar a un Obra en el que la lesión en el hombro de Pepe Pozas tampoco ayudó a mejorar el día más bien gris del equipo. A la espera de la evolución del base malagueño en los próximos días, la situación del equipo sigue siendo muy tranquila, lejos de los puestos de descenso y todavía con opciones de seguir mirando hacia arriba. La visita del próximo sábado de nuestro "enemigo habitual", el Murcia, ha de marcar en buena medida lo que va a ser el tramo final de la temporada, justo antes del parón copero. Con el 9-10 actual y 5 triunfos de ventaja sobre Betis y Joventut, el objetivo de la permanencia está muy cerca de conseguirse y muy mal se tendrían que dar las cosas para que haya que mirar hacia abajo en demasía, por lo cual un triunfo ante los pimentoneros permitiría mantener vivo aunque sea en la lejanía el sueño de completar metas más ambiciosas.


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