viernes, 13 de mayo de 2016

Andorra - Obradoiro (la previa)

(foto: ACB Fotoclick)

Penúltima jornada de liga regular, con la visita del Obradoiro a tierras pirenaicas para enfrentarse al Andorra. Todavía sin asegurar la permanencia en ACB, el Obra intentará no ser el equipo débil que durante toda la temporada ha sido a domicilio y conseguir por fin esa victoria que traiga la tranquilidad definitiva a Sar. El rival no se juega nada más que darle una alegre despedida a su afición, pero para los nuestros será un encuentro de alta tensión en el que poder evitar sorpresas que nos obliguen a llegar a un último partido agónico la semana siguiente ante Unicaja.


Quizás se esperaba algo más de la temporada del Andorra, después de solventar con holgura la temporada del retorno a la ACB. Aunque tuvieron un inicio complicado (record de 1-4), rápidamente se engancharon a la zona media de la clasificación, siempre en el límite del 50% de victorias. Llegaron a la última jornada de la primera vuelta con opciones de meterse en la Copa, e incluso terminaron marzo con un triunfo en Manresa que los colocaba con 11-13 en plena pelea por los últimos puestos de playoffs. Sin embargo, a partir de ahí se vinieron abajo, enlazando 5 derrotas seguidas (entre ellas una en San Sebastián) que enterraron sus posibilidades de alcanzar el éxito. Su rendimiento a domicilio había sido bueno en la primera vuelta, aunque ha ido decayendo en los último meses hasta el 5-11 actual. Sin embargo, donde ya desde el principio se mostraron muy vulnerables es en su propia cancha, que siempre había pasado por ser una plaza complicada de asaltar. Allí los andorranos han ganado solo 7 partidos (+3 a Unicaja, +18 a Gipuzkoa, +7 a Gran Canaria, +19 a Sevilla, +10 a CAI, +2 a Estudiantes y +31 a Joventut), perdiendo nada menos que en 9 ocasiones (-10 con Bilbao, -3 con Manresa, -23 con Barça, -19 con Real Madrid, -8 con Valencia, -2 con Canarias, -9 con Fuenlabrada, -5 con Murcia y -8 con Baskonia). En tierra de nadie, sin peligro de descenso pero ya sin opción alguna de llegar al octavo puesto, y con un único triunfo en las últimas 8 jornadas, los del Principado solo aspiran a terminar lo mejor posible un curso en el que la sensación de haberse quedado a medias es grande.

Joan Peñarroya sigue un curso más al mando de la nave andorrana. La continuidad de gran parte de la plantilla de la temporada anterior, unida a la llegada de un jugador del nivel de Shermadini, dotaba al equipo de una solidez que debía de permitirle subir algún peldaño en el escalafón liguero. A una rotación compensada y de buen nivel se unió incluso, cuando los playoffs parecían una meta alcanzable, la llegada de un base anotador como Stephen Holt para cubrir la lesión de David Navarro y terminar de completar una rotación larga y variada de 10 jugadores con los minutos bastante repartidos (mas el undécimo, Pino, que ya baja a los 8 mpp). Los problemas de Andorra no han llegado normalmente por el lado del ataque (más de 81 ppp), sino más bien en el apartado defensivo, donde al equipo le ha faltado siempre algo de intensidad (4ª peor defensa de la liga, con 83,2 ppp). De hecho, las casi únicas estadísticas de equipo en las que Andorra se sale de la media de la liga son las de faltas cometidas (el 4º que menos hace) y el de las faltas recibidas (el 3º que menos provoca). Con todo, la calidad individual de varios de sus jugadores es incuestionable en un equipo con muchos puntos en sus manos (Shermadini, Bogdanovic, Stojanovski o Holt). En la posición de base, Thomas Schreiner mantiene su nivel regular y en segundo plano, pasando y pudiendo tirar desde fuera con aceptable acierto. Es un base muy alto que roba muchos balones, no pierde demasiados y no suele tomar decisiones alocadas. Víctor Sada se ha perdido varios partidos durante el curso por varios problemas de lesiones. Experto defensivo, apenas genera peligro desde el exterior (¡15% en triples!) pero hace bastantes cosas (rebotes, pases, trabajo de intendencia). El físico, su mejor cualidad durante toda su carrera, le ha fallado en muchas ocasiones este año, y de hecho lleva un par de jornadas sin poder ayudar a sus compañeros. Stephen Holt es un combo muy anotador (más que pasador), con muy buena mano desde la distancia y que llegó en la segunda vuelta para ayudar al equipo. Comenzó con muy buen pie (14 puntos en 21 minutos en Bilbao), aunque ha tenido un rendimiento algo irregular que alterna partidos de muchos puntos en pocos minutos con otro días menos afortunados. Cuando está en cancha tira mucho (más de 6 lanzamientos en solo 17 mpp), aunque no siempre sabe entender el momento de cada partido y le cuesta bajar las revoluciones en ataque, lo que le lleva a cometer pérdidas. Desde su llegada han bajado los minutos del que era el escolta titular, David Navarro. El valenciano es un jugador pequeño, con mucho talento en ataque aunque no se prodiga demasiado en el lanzamiento exterior (40% de acierto en triples, pero tirando poco). Muy hábil en penetraciones y en campo abierto, listo leyendo las debilidades de la defensa rival y, eso sí, con debilidades en su trabajo defensivo. Brilló en la única victoria del equipo en los últimos meses (12+2+10 para 21 de valoración ante el Joventut), demostrando su eléctrica visión de juego que le hace ser un especialista en jugarse ataques calientes. Vojdan Stojanovski es un jugador muy intenso en la cancha, con calidad anotadora (incluso sin un tiro exterior demasiado fiable) y esfuerzo defensivo, algo que consigue a base de echarle ganas (y muchas veces cargarse de faltas). Potente en penetraciones y buen pasador, tiende a perder balones de más por exceso de intensidad, pero es un jugador de los que no se arruga y quizás el más rocoso del equipo. En el partido de ida fue de los que más problemas causó a los nuestros (24+4+3, con 8 faltas provocadas, para 29 de valoración, tope personal de la temporada). En la posición de alero, el titular es casi siempre Betinho Gomes. El caboverdiano es un jugador capaz de lo mejor y lo peor. Tiene buena mano (40% en triples), gran capacidad física para correr y saltar (buen reboteador), pero también suele tener muchas lagunas de concentración que le llevan a cometer errores o a desparecer en muchos partidos. Su rendimiento ha caído en picado en la última mala racha de Andorra, con apenas un par de partidos a buen nivel en los últimos meses. El catalán Sergi Pino completa la rotación de aleros como jugador de fondo de rotación, muy pocos minutos en cancha y sin intentar casi nada en ataque. Luka Bogdanovic es un típico cuatro abierto, muy peligroso por su buena mano desde la distancia y su facilidad anotadora. El serbio no es amigo de fajarse demasiado en la pintura ni es un gran reboteador (se juega más tiros de 3 que de 2), pero es un martillo anotador que pocas veces baja de los dobles números. Cuanto más se le mete hacia el interior más sufre en defensa. En comparación, incluso un jugador no demasiado intenso como el inglés Daniel Clark aporta más energía en la pintura. El ex del Estudiantes se quedó en menos de lo que prometía en su juventud, aunque su buena mano desde lejos y una envergadura que le permite ir bien al tapón son factores que ayudan al equipo desde su labor de jugador de rotación. En las últimas semanas está rindiendo a muy bajo nivel (4 de los últimos 5 con valoración 0 o negativa). El mayor peligro de Andorra está en el puesto de pivot y se llama Giorgi Shermadini. El georgiano es un jugador con multitud de recursos ofensivos, con un estilo aparentemente tosco y algo lento pero sumamente efectivo. Casi siempre ronda el doble-doble, sin ser un gran defensor coge muchos rebotes gracias a su altura y en la pintura es muy complicado de frenar si le llegan balones. Físicamente no aguanta muchos minutos seguidos (solo 22 mpp durante la temporada), pero en las últimas semanas se ha dedicado a acumular estadísticas de vértigo (34, 36 y 38 de valoración de forma consecutiva; en la última jornada bajó a 14). Shawn Jones completa la rotación interior andorrana para dar descansos a los titulares. El norteamericano no es muy alto pero sí es muy poderoso físicamente. Su rango de acción en ataque se limita a las cercanías del aro y a hacer mates, siempre con mucha intensidad. Va bien al rebote y, eso sí, no tiene una calidad técnica demasiado grande, lo que le lleva a perder balones.

La plantilla del rival

  • Bases
    • 5. Thomas SCHREINER (1,95 m, 29 años). 6 ppp, 1,5 rpp, 3,9 app, 1,3 brpp
    • 7. Víctor SADA (1,93 m, 32 años). 4,3 ppp, 3 rpp, 3,1 app, 15% t3
  • Aleros
    • 14. Stephen HOLT (1,93 m, 24 años). 9,2 ppp, 1,5 rpp, 1,1 app, 62% t2
    • 15. David NAVARRO (1,90 m, 33 años). 6,8 ppp, 2 rpp, 2,7 app, 40% t3
    • 19. Vojdan STOJANOVSKI (1,94 m, 28 años). 12,4 ppp, 2,4 rpp, 2,3 app, 3,3 fpp, 11,5 val
    • 11. BETINHO Gomes (2,01 m, 31 años). 8,6 ppp, 4,7 rpp, 1 app, 40% t3, 59% t2
    • 9. Sergi PINO (1,97 m, 28 años). 1 ppp, 0,9 rpp, 0,4 app
  • Pivots
    • 35. Luka BOGDANOVIC (2,03 m, 31 años). 11,9 ppp, 3,3 rpp, 1,2 app, 11,1 val
    • 10. Daniel CLARK (2,10 m, 27 años). 7 ppp, 2,8 rpp, 0,8 app, 0,6 tpp
    • 16. Giorgi SHERMADINI (2,16 m, 27 años). 13,4 ppp, 5,9 rpp, 0,4 app, 0,7 tpp, 4,7 fppp, 4,8 t2pp, 62% t2, 17,2 val
    • 12. Shawn JONES (2,03 m, 24 años). 8,4 ppp, 3,4 rpp, 0,1 app, 64% t2
El Obradoiro decepcionó en su visita a La Laguna, una cancha que nunca se le ha dado bien pero en la cual rindió a un nivel muy bajo, sobre todo en ataque. Esa primera oportunidad perdida de cerrar la temporada convierte el partido de Andorra en un nuevo matchball para los nuestros, que podrían dejar zanjada la permanencia en caso de triunfo sin necesidad de esperar un día más por la esperable victoria del Barça en cancha de Estudiantes. Sin embargo, el flojo rendimiento del Obra fuera de Sar, con aquel triunfo aislado en Manresa, no invita en principio al optimismo, aunque el rival no se juegue nada más que darle una última alegría a su afición. Si el Obra quiere ganar en el Principado (algo que ya hizo la temporada pasada) tendrá que mostrar una intensidad mayor que la del último partido, pero sobre todo no puede permitirse un ataque tan desastroso (en dirección y en acierto) como el que se vio en La Laguna. Frenar a Andorra pasa por llevar el partido controlado y a ser posible a un tanteo bajo. El control del juego como 4 abierto de Bogdanovic, que es algo que siempre da problemas a nuestra defensa, puede ser una de las claves para el éxito obradoirista. El equipo de Peñarroya sufre si tiene que defender y jugar partidos duros, y los nuestros tienen que guiar el juego a esos parámetros para tener opciones, ya que un partido abierto y de fácil anotación va a ser muy complicado de ganar para el Obra (milagros como el del triunfo de la primera vuelta en Sar no se dan muy a menudo). No se sabe si Adam Waczynski llegará a ser inscrito finalmente para el partido, aunque no habría que exigirle demasiado en caso de jugar. En resumidas cuentas, un partido difícil para el Obra pero en el que hay que intentar remachar la permanencia para no depender de resultados de terceros, que por más previsibles que parezcan siempre pueden deparar alguna sorpresa desagradable.

Datos del partido
Andorra - Obradoiro. 33ª jornada ACB. Pavelló Govern Andorra. Sábado, 14 de mayo. 21:00 horas. Televisado por Movistar + (canal 195)

Resultados anteriores
  • temp. 86/87: Andorra - Obradoiro 99-96 (Primera B)
  • temp. 87/88: Andorra - Obradoiro 101-81 (Primera B)
  • temp. 88/89: Andorra - Obradoiro 88-75 (Primera B)
  • temp. 89/90: Andorra - Obradoiro 90-80 (Primera B)
  • temp. 91/92: Andorra - Obradoiro 96-86 (Primera División)
  • temp. 14/15: Andorra - Obradoiro 65-74


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