Se fue en el último suspiro (de nuevo) (93-92)

Thomas Scrubb (foto: ACB Photo)

El Obradoiro perdió en Fuenlabrada tras otro final agónico en el que incluso dispuso del tiro para la victoria (93-92). Los de Moncho Fernández se vieron desbordados por la intensidad física local durante gran parte del partido, con ventajas en aumento para el Fuenla y un Obra errático que solo sumaba en la casilla de pérdidas en los primeros minutos. Con un +14 para los fuenlabreños al principio del segundo cuarto (34-20), el Obra sobrevivía malamente con algunos triples en transición pero se veía de nuevo contra las cuerdas al comienzo del tercer período, ya 18 abajo (56-38). Con el partido más o menos controlado por los locales, a partir del minuto 25 se producía un cambio radical en la cancha, de la mano de nuestra segunda unidad, con hasta 6 triples sin fallo consecutivos y una subida de presión defensiva brutal liderada por un Okouo diferencial, para un parcial de 0-17 que volteaba por completo el partido (60-61). En el último cuarto la igualdad ya era la tónica predominante, con un desgaste físico enorme por ambos bandos y un final a cara o cruz, en el cual el Obra moría con la misma arma con la que había sobrevivido anteriormente, el triple, y con un tiro lateral de 4 metros de Robertson para la victoria que no entraba. Con esta derrota, el Obradoiro se queda con un record de 9-18 y una ventaja de un solo partido sobre el penúltimo clasificado, un Zaragoza al que rendirá visita el próximo miércoles en otro partido fundamental para ambos.

Partido vital ante un rival directo como el Fuenlabrada, que comenzaba el encuentro con Samar, Emegano, Meindl, Cheatham y Ristic. El Obradoiro, con el apoyo de unas decenas de aficionados en la grada, lo hacía con los habituales Hobbs, Robertson, Thomas Scrubb, Ellenson y Birutis. La primera canasta de Thomas Scrubb tras apenas un par de segundos, bajo el aro, era un espejismo de lo que se nos iba a venir encima. La primera pérdida de Hobbs permitía la canasta fácil en transición del Fuenla, precediendo a un nuevo balón perdido por nuestro base. Un canastón en bandeja de Thomas Scrubb empataba el partido (4-4), pero otro balón perdido más, ahora del alero canadiense, permitía el contraataque y el 2+1 de Samar. El Obra seguía aumentando el casillero de balones perdidos, ahora con una falta en ataque de Birutis, aunque el triple de Robertson y un par de libres del propio Birutis tras buen pase en la transición de Hobbs daban una efímera ventaja a los nuestros. Samar rompía con facilidad en el 1x1 a Hobbs por partida doble, aunque otra buena jugada de Thomas Scrubb en la pintura y un triple de Hobbs ponían 3 arriba al Obra (11-14). Hasta ahí llegaban los nuestros, que se venían abajo ante la propuesta dinámica y alegre del ataque local mientras continuaban con el carrusel de pérdidas y añadían una debilidad física notable en la defensa interior, concediendo rebotes ofensivos por doquier. Emegano se llevaba a un Robertson inferior en físico al poste bajo, Okouo fallaba en ambos lados de la cancha, el Fuenla seguía corriendo y el parcial era ya de 10-0 (21-14). Ellenson sacaba falta en su penetración para anotar los libres, pero nuestra defensa concedía canastas de manera continua. Un solitario tiro libre de 2 anotado por Phil Scrubb era la única respuesta anotadora durante el resto del cuarto, mientras el número de pérdidas aumentaba sin cesar y la ventaja local se iba ya a 9 puntos tras esos 10 primeros minutos a pesar de un parón conjunto de cerca de 2 minutos sin anotación y ambiente de correcalles (26-17).

Fuenlabrada seguía anotando con suma facilidad en el inicio del segundo cuarto, aunque un triple de Phil Scrubb evitaba males mayores por el momento. El canadiense sufría para subir el balón y una pérdida suya concedía otra canasta fácil más a los locales, ya 12 arriba. El tiempo muerto de un enfadadísimo Moncho Fernández no cambiaba las cosas, sumando de inmediato la décima pérdida del partido y concediendo una canasta en bandeja más para la colección local y un dramático -14 en contra (34-20). 2 triples en transición en apenas 10 segundos de Kassius Robertson devolvían a la vida a los nuestros por unos instantes (34-26), aunque el fogonazo de acierto desaparecía rápidamente. Nuestra defensa interior seguía siendo un coladero, bien en las ayudas a penetraciones o directamente con el festival de Ristic ante Birutis, que tras una buena canasta bajo aro del lituano daba paso a un recital del pivot serbio. Con Álvaro Muñoz fallando incluso 2 tiros libres, los 8 puntos (2 triples incluidos) de Ristic elevaban la renta local a un peligroso +15 (43-28). El Obra sobrevivía al borde del KO con otra jugada al poste bajo de Thomas Scrubb y una suspensión lateral de 4 metros de Hobbs tras saque de fondo, y 3 tiros libres de Phil Scrubb tras recibir falta en su intento triple bajaban a -10 (45-35). Sin embargo, el equipo se paraba casi por completo en los 2 minutos finales del cuarto, de nuevo enredado en pérdidas y malas decisiones en ataque bajo la espesa dirección de Zurbriggen, llegando al descanso 14 abajo (50-36).

La canasta de Birutis tras el paso por los vestuarios carecía de continuidad, con el partido de nuevo asentado en lo ya conocido de la primera mitad a pesar de la entrada de Suárez como 4 en lugar del desacertadísimo Ellenson. El ritmo rápido y no demasiado controlado del juego beneficiaba a los locales, ya 18 arriba tras el triple lateral de Emegano (56-38). El Obra reaccionaba tímidamente tras el obligado tiempo muerto de Moncho Fernández a base de meter buenos balones a un Birutis que se inventaba un inverosímil 2+1 en penetración sobre Samar. El lituano sumaba de nuevo en la pintura tras forzar nuestra defensa la pérdida de 24 segundos al rival (56-44), aunque tras el tiempo muerto fuenlabreño volvían los problemas habituales en el rebote defensivo y las pérdidas y en un instante el equipo se veía de nuevo 16 abajo tras el mate de Meindl después de robo (60-44). Un par de libres de Robertson daban inicio, aunque entonces no lo pareciera, a un cambio radical en el partido. Tras otra nueva pérdida de balón subsanada al instante, el Obra encadenaba una alucinante catarata de triples: el primero de Hobbs, tras salvar un balón casi perdido; el segundo, de Álex Suárez en tiro abierto; tras un par de libres de Thomas Scrubb aprovechando un balón suelto, y con el equipo por fin defendiendo a un altísimo tono físico bajo el liderazgo de Okouo, con un tiro libre más de Phil Scrubb tras la técnica a Milosavljevic, caían otros 2 triples consecutivos de un Beliauskas encendido, que sumaban un impresionante parcial de 0-17 para culminar la remontada (60-61). Novak rompía la sequía de los suyos ante la impresionante defensa obradoirista, pero elos nuestros continuaban con el festival triplista y añadían 2 más de manos de Suárez y Phil Scrubb, con el sexto triple consecutivo sin fallo para cerrar el cuarto con 2 arriba para el Obra (65-67).

El partido regresaba a un intercambio de canastas, ya con el marcador continuamente igualado en el último cuarto. Phil Scrubb anotaba en penetración a pesar del empujón no pitado, y aunque Okouo cometía pasos en la continuación del 2x2, Muñoz añadía otro triple más a la cuenta para volver a igualar la contienda. Okouo repartía estopa en defensa a costa de ir sumando faltas, aunque también intimidaba y anotaba una buena canasta en ganchito a la media vuelta para mantener el partido en todo lo alto. Con un brutal desgaste físico por ambos bandos y peleando cada balón como si les fuera la vida en ello, las acciones individuales aisladas se iban alternando mientras se acercaban los minutos finales. Okouo solo anotaba el primero de los libres tras sacar falta después del rebote en ataque, pero Muñoz se llevaba el rechace y anotaba para volver a empatar una vez más (77-77). La cuarta falta del congoleño lo llevaba al banquillo, pero de nuevo Beliauskas clavaba el triple frontal en transición. De nuevo con Okouo en pista, el ritmo del partido era una locura y los jugadores acusaban el esfuerzo con errores y malos tiros por ambos bandos. El Obra volvía a igualar la contienda tras sumar Ellenson por fin cargando desde el poste bajo y sumar un tiro libre Phil Scrubb tras la técnica al banquillo local (83-83). Okouo fallaba una canasta hecha bajo aro, pero machacaba el aro con fuerza a pase de un Ellenson que tras el rebote defensivo del congoleño sumaba un triple lateral que ponía 3 arriba al Obra a falta de menos de 2 minutos (85-88). Phil Scrubb mantenía la ventaja con una enorme penetración con la izquierda sobre Samar (87-90), pero Okouo cometía una ingenua quinta falta sobre un Samar sin salida bajo el aro. Robertson fallaba el triple y Samar metía el balón elevado para que Alexander pusiera por delante a los suyos con solo 43 segundos por delante. El Obra buscaba los triples que le había llevado a remontar el partido, pero ahora no entraban y enterraban las opciones de victoria de los nuestros, con Emegano anotando en contraataque para un +3 casi definitivo (93-90). Robertson recibía una falta rápida al borde de la antideportiva, anotando los libres, y la gran presión del Obra forzaba 2 deflections sin premio. Sin embargo, los nervios traicionaban a Samar, que erraba los 2 tiros libres y dejaba el balón del triunfo para nuestra última posesión, con 16 segundos por jugar. Robertson cogía el balón y buscaba un relativamente posible tiro de 4 metros, pero fallaba en la ejecución. Meindl cogía el rebote y recibía falta, pero ya solo quedaban 2,8 segundos y el brasileño, tras errar el primer tiro libre, tiraba a fallar el segundo para que el cronómetro desgranara esos últimos instantes sin dar opción alguna al milagro. El Obra caía en otro final de infarto más, dejando pasar una gran oportunidad de respirar en esta agónica lucha por la permanencia (93-92).

Datos a destacar

• partido de locos. El Obradoiro fue arrollado a nivel físico de intensidad durante casi 30 minutos, y de repente se enganchó al encuentro con un alucinante 0-17 a base de triples, pero también de un esfuerzo defensivo brutal que supo mantener durante el resto del partido. Hasta ese sorprendente cambio de decorado, los problemas del Obra habían sido muy evidentes, superados por un rival que juega a toda velocidad y que dominó la situación con cierta holgura
• las pérdidas, clave de los horribles primeros minutos: la cuenta de balones perdidos llegó a ir 1-10, con el Obra asfixiado en ataque y concediendo transiciones y canastas fáciles en bandeja. El coladero de ese período en nuestra defensa llevó al equipo a encajar una montaña de puntos que nuestro ataque no era capaz de compensar. Incluso con el cambio de tendencia del partido, el Fuenla tiró a canasta hasta 13 veces más que los nuestros, lo que sumado a la superioridad reboteadora local (39-29) remataba la situación hasta el 60-44 del minuto 25
• el cambio radical: 6 triples seguidos sin fallo, una subida espectacular en la intensidad defensiva con Okouo y Suárez como pareja interior y Beliauskas mordiendo en la presión, y un 0-17 que nadie habría imaginado unos minutos atrás. Las pérdidas se equilibraron finalmente gracias al trabajo de nuestra defensa, durísima en la presión (14-14). El equipo mantuvo esa tónica de dureza máxima atrás, con aciertos y errores, mientras el rival respondía igualmente con una intensidad brutal atrás, dejando un tramo decisivo de espectacular desgaste físico y un final a cara o cruz que decidió más la suerte que el buen hacer de los jugadores
• THOMAS SCRUBB: el único que en el principio del partido encontró el modo de sumar en ataque con cierta asiduidad. Trabajó como siempre en ambos lados de la cancha, pero esas 4 canastas de 2 sin fallo no tuvieron continuidad, sin acierto tampoco desde el triple. Su trabajo físico en defensa fue importante para mantener el tono de exigencia en toda la parte final del partido. 13+7+1 en 26 minutos, para 19 de valoración
• BRAYDON HOBBS: superado por la intensidad del juego. El incisivo Samar lo castigó en defensa, mientras que en la dirección solo consiguió manejar la situación en las transiciones y jugadas de "listo", como con los 2 triples sumados. Partícipe del aluvión de pérdidas del primer cuarto, no pudo estar cómodo en la cancha casi nunca, hasta el punto de no participar del tramo final del encuentro. 8+2+3+2 en 19 minutos, para 7 de valoración
• KASSIUS ROBERTSON: no tuvo un día lucido el escolta canadiense, aunque un par de triples seguidos en el segundo cuarto salvaron un casi match-ball. En realidad no anotó más a partir de entonces hasta los tiros libres del tramo final, fallando 2 tiros en el último minuto y con muchos problemas ante la defensa de Emegano. A su vez sufrió lo indecible ante el escolta fuenlabreño, que lo llevaba al poste bajo y lo superaba con facilidad. En resumen, un mal día en la oficina para el bueno de Kass. 13+0+2 en 25 minutos, para 11 de valoración
• HENRY ELLENSON: desbordado en ambos lados de la cancha en todo momento, el partido le pasó por encima de forma clara. Sin embargo, en los minutos finales asomó con 5 puntos seguidos y una asistencia que pudieron haber sido decisivos para ganar el encuentro. Demasiado poco para nuestro 4 titular, que de nuevo estuvo a un nivel bajísimo, incapaz de sostener el nivel físico y de intensidad que el rival exigía (-15 con él en cancha). 7+3+1 en 21 minutos, con 3 pérdidas, para 4 de valoración
• LAURYNAS BIRUTIS: tampoco pudo el lituano con la exigencia física del partido. Desbordado atrás por los interiores rivales en plena debacle defensiva obradoirista, encontró sus momentos de acierto en ataque en el inicio del tercer cuarto, pero claramente insuficientes para mantener al equipo en la pelea. Cuando recibió balones, sumó, a pesar de todo (4 de 4 en tiros de 2). En el tramo final no tuvo participación ante el brutal trabajo de Okouo en defensa. El -19 con Birutis en cancha es demoledor (el peor del equipo). 13+3 en 23 minutos, con 5 faltas provocadas, para 18 de valoración
• PHIL SCRUBB: por momentos lo pasó mal para llevar el balón (definitivamente ejerciendo de base) ante la presión rival. Su buena mano en el triple le dio puntos al equipo, así como un par de buenas penetraciones (una en los minutos finales que ponía el partido muy bien para el Obra). Claramente le está dando cosas buenas al Obra desde su incorporación, con muchas ganas en todas sus acciones y asumiendo responsabilidad sin temor. 13+1+2 en 21 minutos, para 11 de valoración
• ÁLEX SUÁREZ: el agujero negro de Ellenson en la cancha hizo que Álex Suárez volviera a tener muchos minutos en el partido. El balear sumó un par de triples en el festival del 0-17 que cambió el partido, pero además añadió una intensidad defensiva espectacular para ayudar al omnipresente Okouo, manteniendo al Obra en la pelea hasta el final. +14 con él en cancha, nada menos. 6+2+1 en 19 minutos, para 5 de valoración
• VINY OKOUO: además de la racha triplista, el factor diferencial que cambió el partido fue la irrupción del pivot congoleño en la cancha. Torpón y poco importante en su primera aparición, Viny encontró su sitio en esos minutos de locura, con un despliegue físico colosal y repartiendo estopa por todos lados. Aguantó en los cambios con pequeños, intimidó, cerró huecos y colaboró en ataque con aciertos y errores, pero sobre todo añadió varios grados de intensidad a un equipo que siempre anda justito en esos menesteres. La inocencia con las faltas lo sacó del partido a falta de un par de minutos, pero el +18 con él en cancha es un dato brutal. 5+5 en 17 minutos, para 1 de valoración
• ÁLVARO MUÑOZ: colaboró con la unidad de resistencia de la rotación aportando intensidad y esfuerzo, además de un par de buenas canastas que dejaban al equipo por delante al inicio del cuarto período. Ayudó bien en el rebote y aguantó en defensa correctamente. 5+3+1 en 13 minutos, para 9 de valoración
• LAURYNAS BELIAUSKAS: espectacular aportación del lituano en el tramo que cambió el partido por completo. No solo con sus triples, sino con su intensidad defensiva en la presión en primera línea, trabajo que alargó hasta las jugadas finales. Difícil hacer más en menos tiempo, aportando soluciones cuando los titulares no eran capaces de sacar adelante la situación. 9+2+1 en 13 minutos, para 8 de valoración
• FERNANDO ZURBRIGGEN: relegado a la condición de tercer base con la llegada de Phil Scrubb, el argentino apenas apareció en el tramo final del segundo cuarto, alocado en ataque y peleón aunque sin éxito en defensa. 0+1+1 en 2 minutos, para -2 de valoración

Otro final agónico, en esta ocasión saldado con derrota. El Obra naufragó durante más de 25 minutos víctima de su inferioridad física y en intensidad ante un Fuenla que juega a eso y se siente cómodo en la locura a todo ritmo. De repente, de manera insospechada, el equipo encontró la forma de igualar la situación con triples y una subida brutal en defensa. Faltó claridad para amarrar el triunfo en los minutos decisivos, perdiendo una oportunidad magnífica de sumar una victoria que nos habría dado un importante colchón de seguridad. La derrota de Zaragoza en Sevilla hace que el próximo partido de este miércoles vuelva a ser otra finalísima por la permanencia (de nuevo hay que recordar el +5 de la ida en Sar), sin olvidar que el sábado tocará volver a jugar a vida o muerte en Burgos (y con el +7 de la ida también en mente). Será una semana decisiva para la permanencia, en la que hay que amarrar al menos un partido para no vernos metido en posición de descenso antes de las 5 últimas jornadas, situación que el Obra no ha vivido en todos estos años pasados. Con el despliegue físico de los últimos 15 minutos en Fuenlabrada, las posibilidades de éxito aumentarán mucho, sin duda alguna.