Con V de Vladi (91-81)

Vldi Brodziansky (foto: Obradoiro de Basket)

El Obradoiro sumó su quinta victoria de la temporada ante un Estudiantes que rozó la remontada pero no pudo con un colosal Vladi Brodziansky, que terminó el partido con unos números de impresión (27+5+1 para 37 de valoración). Los de Moncho Fernández mandaron en todo momento en el marcador, con pequeñas ventajas desde el inicio que se ampliaron de golpe gracias a una catarata de triples en el segundo cuarto, hasta un +16 al descanso (46-30). En el tercer cuarto el protagonismo recayó de manera brillante en un Brodziansky infalible en ataque, que con 12 puntos seguidos sin fallo mantuvo las diferencias en el marcador a pesar de los esfuerzos visitantes. El Obra llegó a ganar hasta por 22 puntos (71-49), pero un mal comienzo del último período y varias canastas fáciles falladas empezaron a dar alas al rival, que con un parcial de 0-8 se ponía a solo 4 puntos a falta de 3 minutos y medio (80-76). Con Sar apoyando al máximo, el Obra supo mantener la calma y aprovechar los tiros libres para evitar la remontada y terminar venciendo por 10 puntos de diferencia (91-81). Con esta victoria, el equipo se sitúa en la zona media-baja de la tabla con un record de 5-7.


Entrada habitual y gran recibimiento al equipo tras su triunfo en Zaragoza, ante un Estudiantes que comenzaba el partido con Cook, Brizuela, Gentile, Caner-Medley y Jankovic. El Obra, con la baja de Pozas (y con de Zeeuw que no llegaría a saltar a la cancha tampoco), lo hacía con Sàbat, Simons, Singler, Llovet y Brodziansky. El encuentro comenzaba con Singler llevándose al poste a Gentile para anotar en ganchito, respondido por un brutal mate de Brizuela. El propio escolta visitante caía mal en una penetración y el partido se paraba durante unos minutos, enfriando a los jugadores de ambos equipos. El Obra volvía a la carga de nuevo con Singler, que anotaba tras una buena suspensión corta, y de un Ben Simons que inauguraba la cuenta de triples del equipo saliendo de bloqueo. El Obra sufría para cerrar su rebote defensivo, aunque la actividad de Singler era protagonista en ataque y se veía acompañada por un Brodziansky acertado desde el triple y machacando a pase del propio Singler. Sàbat movía bien al equipo y asistía para la canasta bajo aro de Llovet que ponía 7 arriba a los nuestros (15-8). A pesar de que seguían las dificultades para cerrar bien el rebote en defensa, el juego interior local dominaba en ataque, con Brodziansky sumando desde la línea de libres y Llovet posteando sobre Gentile para el +8 (19-11), pero Gentile sacaba un 2+1 en un contraataque para rebajar la diferencia en el marcador al final del cuarto, a pesar de un par de buenos ataques sin fruto del Obra (19-14).

El Obra comenzaba fuerte el segundo cuarto, con Sàbat anotando en buena suspensión lateral y Hlinason aprovechando un buen balón interior para el +9 (23-14). Un par de despistes del islandés atrás permitían acercarse al Estu, aunque también metía un buen pase bajo aro al recién incorporado Spires. Las entradas de Brizuela eran complicadas de defender, el Obra parecía atascarse en ataque bajo la dirección de Navarro y tras otro rebote defensivo perdido un triple lateral de Vicedo apretaba el partido en un puño (25-23), pero tras el tiempo muerto llegaba la tormenta perfecta obradoirista. Andy Obst anotaba un triple de 8 metros tras una posesión espesa y forzaba una falta de ataque, Kostas se escapaba de la marca de Cook para clavar un triplazo y Obst anotaba otro más en transición para poner al Obra 11 arriba. Ni siquiera el tiempo muerto de Berrocal paraba la catarata, ya que tras una inteligente canasta en bandeja tras finta de Llovet caía sin remisión el tercer triple consecutivo de un Obst enrachado. Por si fuera poco, Simons entraba en pista por Singler y clavaba 2 triples consecutivos más, que ponían al Obra 17 arriba tras un parcial escandaloso de 17-3 (45-28). Una falta antideportiva de Sola en el alocado intento de presión sobre Navarro dejaba por unos momentos la sombra de la lesión de Pozas unas semanas atrás, pero mientras el valenciano se recuperaba en el banquillo Sàbat anotaba uno de los libres y Spires no conseguía culminar el alleyoop sobre la bocina de final de cuarto, con Sar disfrutando del momento y el equipo 16 arriba (46-30).

El tercer cuarto tenía un protagonista máximo en el Obradoiro, y no era otro que Vladi Brodziansky. El eslovaco dominaba en el poste bajo con insultante facilidad a un Caner-Medley impotente, aunque el norteamericano también le causaba problemas a Vladi al irse al triple con acierto. El Obra concedía canastas fáciles tras pérdidas y se encontraba con un Singler que se peleaba con su propia mala suerte, pero mantenía su holgada ventaja gracias al acierto en ataque de un Brodziansky infalible, ahora con su segundo triple del partido. Una antideportiva de Sàbat sobre el 2+1 de Cook callba unos instantes a la grada, pero Brodziansky seguía sumando con otro triple más tras una gran defensa colectiva. El Estu se sostenía con los triples de Caner-Medley, pero Brodziansky anotaba de nuevo, 12 puntos consecutivos ya, ahora de nuevo posteando ante Suton. Con el Estu desesperado en la defensa de Vladi, era Llovet quien aprovechaba las continuas ventajas interiores sacando faltas y anotando un triple liberado en transición para el +17. El Obra parecía resistir sin problemas las embestidas visitantes lideradas por Gentile, con Kostas sacando rédito de los tiros libres. Navarro entraba de nuevo en pista con una buena suspensión de 6 metros y un par de libres tras recibir falta, y Vasileiadis se añadía al festival con otro triplazo de los suyos para la máxima ventaja de +22 (71-49) y con otra buena canasta más en suspensión corta. El Estu tiraba de Gentile y de un incisivo Clavell, pero Brodziansky cerraba su mágico cuarto con otro ganchito tras ganar la posición bajo el aro y dejar al Obra 19 arriba (75-56).

Todo parecía encarrilado en Sar, pero el Obra salía relajado y recibía un rápido parcial de 0-8 con un par de triples en poco más de un minuto que devolvía cierta tensión a la grada (75-64). El tiempo muerto parecía frenar la tendencia negativa, con Spires anotando en bandeja a pase de Obst, pero Clavell tenía su buena racha del partido y los nuestros se enredaban en ataque, con Singler peleado con la agresiva defensa de Cook y algún mal tiro de los interiores desde el triple. Apenas un par de libres de Llovet daban aire a un Obra cada vez más parado en ataque (80-68). Las quintas faltas de Singler y Sàbat sobre Caner-Medley llegaban todavía con el Obra 10 arriba tras alirse del aro una buena penetración de Obst, pero el Estu se metía de lleno en el partido tras otro parcial de 0-8 con un triple de Clavell y una bandeja de Cook, todavía con 3 minutos y medio por jugar (80-76). Sar temía por el partido y reaccionaba animando al equipo como en los mejores tiempos, y el Obra volvía a meter balones a Brodziansky, que forzaba faltas y sumaba desde la línea de libres 4 puntos seguidos que sabían a gloria. Gentile tiraba de clase para enfriar por unos segundos la caldeira, pero Obst compensaba un precipitado tiro de 3 forzando la falta en ataque del italiano y, en la siguiente jugada, solventaba un espeso ataque con una gran penetración sobre Gentile que sabía ya a triunfo. Ya quedaba poco más de un minuto y el Obra cerraba casi definitivamente el partido tras el rebote en defensa del alemán y el gran pase bajo aro de Navarro para la canasta de Simons que devolvía el +10 al marcador (88-78). Los segundos finales transcurrían ya con tranquilidad y servían para que el gran Brodziansky cerrase su partidazo con otros 2 tiros libres más anotados que cerraban el marcador final (91-81).

Datos a destacar

• dominio de principio a fin del Obra. Nunca fue por debajo del marcador y casi siempre supo leer las situaciones de partido, bien buscando la superioridad por dentro o bien recurriendo al triple. Solo el parón del último cuarto pudo estropear el completo partido del equipo, pero el Obra fue claro vencedor ante un Estudiantes con individualidades pero con muchos problemas como equipo (104-74 en valoración global)
• a pesar de las bajas (Pozas y en la práctica también de Zeeuw), el equipo fue otra vez largo. Los 10 jugadores en pista anotaron, hubo buen equilibrio entre el quinteto inicial y el de rotación (32 puntos de los no titulares) y cuando había problemas en la cancha los cambios conseguían cambiar la dinámica del juego
• problemillas de inicio en el rebote defensivo, aunque corregidos con el paso de los minutos (6 rebotes ofensivos del Estu en el primer cuarto, solo 1 en el resto del partido). Buen control de las pérdidas, aunque en el tramo final aumentaron (13-14), y equilibrio entre juego interior y exterior (18 canastas de 2 y 12 de 3, además con un gran 55% de acierto). La defensa tuvo algunos problemas ante un rival con jugadores muy hábiles y difíciles de defender, además de varios triples del 4 abierto a los que se llegó algo tarde. Por lo demás, el equipo fue sólido y consistente la mayor parte del partido, incluso en el apagón del tramo final
• VLADI BRODZIANSKY: protagonista máximo del partido, con una actuación memorable que debe de valerle para ser MVP de la jornada en la ACB. El eslovaco fue imparable en la pintura (5 de 6 en tiros de 2), letal en el triple (3 de 4) e infalible desde la línea de libres, sobre todo cuando el partido estaba más caliente (8 de 8). Bien en el rebote, en su debe solo cabe achacarle la defensa de sus pares cuando se iban al triple. Muy bien en el primer cuarto y espectacular con sus 12 puntos seguidos sin fallo tras el descanso. Números para recordar: 27+5+1, con 6 faltas provocadas, para 37 de valoración
• ALBERT SÀBAT: de nuevo dando un paso al frente ante la ausencia de Pozas. Sobrio en la dirección, metiendo buenos balones dentro, sin cometer apenas pérdidas y ayudando mucho en el rebote. Atrás estuvo activo, aunque los missmatches lo castigaron y acabó fuera del partido prematuramente por faltas. Ganando en autoconfianza en la cancha, quizás viviendo sus mejores momentos con la camiseta del Obra cuando más falta hacía. 4+5+6 en 23 minutos, para 6 de valoración
• BEN SIMONS: salió de titular y volvió a ser ese secundario efectivo y cumplidor de los buenos partidos, acertado en el triple y cada vez más asentado atrás para limitar sus carencias. Sufrió en el 1x1 en emparejamientos desiguales (bien con Brizuela o con Gentile), pero sus triples ayudaron a romper el partido en el segundo cuarto y su presencia en cancha siempre es positiva en ataque. El equipo ha notado mucho y para bien su regreso después de la lesión. 11+4 en 30 minutos, para 9 de valoración
• KYLE SINGLER: empezó a gran nivel, castigando desde el poste y siendo muy agresivo en ataque, pero poco a poco se le fueron torciendo las cosas y acabó bastante descentrado. Se cargó de faltas (varias en ataque) y en el tercer cuarto no le salió nada, peleado contra su infortunio. Aún así, su actitud en la cancha demuestra que cada vez está a mejor nivel físicamente y más integrado en el equipo. Habrá días mejores. 5+1+1, con 3 pérdidas, para -4 de valoración
• NACHO LLOVET: lo habitual en el catalán. Trabajo a destajo en ambos lados de la cancha, inteligencia máxima para maximizar sus opciones en ataque y tapar huecos atrás e intensidad constante para ayudar en los tan nombrados intangibles. Aportando un poco de todo y liderando cada vez más claramente al equipo, Nacho sigue siendo fundamental en este Obra. De nuevo una minutada en cancha, el que más del equipo. 12+3+1+2 en 33 minutos, con 4 faltas provocadas, para 15 de valoración
• DAVID NAVARRO: solventó su incómoda situación de base de emergencia con buena nota, a pesar de que por momentos le costó dirigir el ataque fluidamente. La racha de triples del segundo cuarto fue con él en pista e igualmente lo fue el control de los minutos finales cuando el Estu se había puesto a 4. Pocos errores, trabajo constante y máximo esfuerzo por ayudar en un puesto que no es el suyo, muy bien el valenciano. 5+1+8 en 17 minutos, con 4 faltas provocadas, para 14 de valoración
• KOSTAS VASILEIADIS: con problemas musculares (no entró en el quinteto inicial), el griego supo ayudar al equipo con toda su experiencia e intensidad. Tiró poco pero bien (2 de 2 triples mas una suspensión corta), forzó faltas y estuvo activo en la cancha con su efusividad de siempre, haciendo mucho en poco tiempo (+11 con él en cancha, máximo del equipo). 10+2 en 16 minutos, para 10 de valoración
• ANDY OBST: su racha de acierto en el segundo cuarto, con 3 triples consecutivos, fue clave para romper el partido. El alemán siempre parece necesitar un acierto (en este caso un obligado triple de 8 metros sobre la bocina de posesión) para destapar el tarro de las esencias, y de nuevo lo volvió a hacer. En los minutos finales fue también decisivo, con un par de acciones en defensa y ataque que evitaron el susto y aseguraron la victoria. A veces le cuesta frenar sus ímpetus, pero hay madera de buen jugador. 11+2+1 en 16 minutos, para 12 de valoración
• NICK SPIRES: buenos minutos en el segundo cuarto, coincidiendo con la ruptura del partido. El sueco estuvo sólido atrás y participativo en ataque. En su regreso a la pista no le fue tan bien, con alguna mala decisión en ataque, pero su aportación fue positiva para darle el descanso obligado a Llovet y Brodziansky sin que el equipo se resintiera en exceso. 4+3+1 en 14 minutos, con 3 pérdidas, para 2 de valoración
• TRYGGVI HLINASON: entró en el segundo cuarto con una buena canasta, pero también con varios despistes atrás en los que volvió a mostrar su bisoñez, sobre todo en el 1x1 cuando lo encaran. Se fue rápidamente al banquillo y el transcurso del juego ya no precisó de su aportación. 2+0 en 4 minutos, para 2 de valoración

El Obradoiro ganó su quinto partido de la temporada dando una buena imagen colectiva ante un Estudiantes con buenos jugadores pero que no termina de estar conjuntado como equipo. Los de Moncho Fernández sacaron adelante el encuentro con solvencia y clara superioridad, más allá de la reacción visitante en los minutos finales que trajo una dosis de nerviosismo a Sar. La baja de Pozas parecía presagiar un drama, pero sin embargo el equipo ha sabido salir adelante con un par de triunfos, y hombres como Sàbat han dado un claro paso adelante para cubrir las ausencias. Si la semana pasada fueron Kostas y Singler los héroes, en esta el turno le llegó a un Brodziansky que lleva camino de ser un gran jugador, y el Obra sigue sumando pasito a pasito de cara al objetivo de todas las temporadas, una permanencia para la que mantiene un buen colchón de un par de partidos. El próximo partido, de nuevo en Sar ante el Manresa, puede hacer que el Obra dé un salto importante, pero lo que es seguro es que el 5-7 actual es un muy buen balance para el conjunto de Moncho Fernández a estas alturas de la temporada.