lunes, 26 de noviembre de 2018

Huertas doblega a un Obra luchador (74-81)

Nacho Llovet (foto: Obradoiro de Basket)

El Obradoiro resistió durante 35 minutos, contando incluso con ventajas en el marcador durante la segunda mitad, a un Baskonia que finalmente impuso su mayor calidad en el tramo final de la mano de un Marcelinho Huertas imparable. Los de Moncho Fernández se sobrepusieron a la baja de Pepe Pozas a base de un gran dominio en el rebote durante los 2 primeros cuartos, lo que unido al desacierto en el triple de los vascos permitió al Obra equilibrar el marcador y llegar al descanso por delante (35-32). Tras el paso por los vestuarios, el Obra llegó a alcanzar una máxima renta de 7 puntos (43-36), aunque a cada minuto que pasaba eran mayores los problemas en ataque. Con el rival haciendo la goma, todavía pudieron los locales dar un nuevo estirón con un par de triples de Obst y un mate en contraataque de Simons para el +6 al inicio del último período (62-56), pero un acertadísimo Huertas encabezó la remontada baskonista con 9 puntos casi consecutivos para un parcial de 2-17 ante un Obra sin recursos ofensivos (64-73). Los triples finales bajaron la desventaja a 7 pero no permitieron a los obradoiristas luchar por el partido (74-81). Con esta derrota, la séptima en los 8 últimos partidos, el Obradoiro se queda con un record de 3-7 en la decimoquinta posición, con 1 partido de ventaja sobre los 3 últimos clasificados.


Regresaba el Obradoiro a un Sar que sigue alejándose partido a partido de aquella anhelada caldeira, para enfrentarse a un Baskonia que llegaba tras una dura semana de doble jornada europea y comenzaba con Granger, Hilliard, Shield, Shengelia y Poirier. El Obra, con la importante baja de Pepe Pozas y la entrada en el acta de manera testimonial de Laksa, empezaba con Sàbat, Vasileiadis, Singler, Llovet y Hlinason. El ataque local era espeso desde el principio, aunque el equipo conseguía cerrar bien el rebote y una apurada suspensión corta frontal de Singler abría el marcador. Shengelia hacía daño por dentro yéndose al poste, pero Hlinason castigaba bajo el aro por partida doble a un despistado Poirier, con Kostas y Llovet dando muy buenos pases. Las transiciones rápidas baskonistas hacían mucho daño, pero el Obra conseguía inesperadamente ganar de forma abrumadora la lucha reboteadora, lo que permitía segundas opciones en ataque y cerrar el aro propio a un rival negado desde el triple. Vasileiadis anotaba un buen triple, pero Poirier le devolvía las canastas pasadas al inocente Hlinason y la sangría de transiciones con canastas fáciles visitantes seguía abierta. El festival de Huertas comenzaba nada más salir a cancha el brasileño, rompiendo a un impotente Sàbat para el +6 baskonista (11-17). El Obra sufría lo indecible en ataque en el 5x5, pero Kostas tiraba de veteranía y con un par de libres y otro triple más mantenía vivo al equipo a pesar del destrozo creciente de Huertas sobre Sàbat. El griego asistía de nuevo a Hlinason para la penetración fácil del islandés y Sàbat clavaba el triple tras otro complicado ataque local, para empatar el partido de nuevo. El último minuto era un intercambio de errores, con el Baskonia sumando triples fallados y el Obra, en el que Navarro ejercía de base, aumentando la cuota de pérdidas, que ya iba por las 5 (21-21).

El segundo cuarto se iniciaba con otra más de Huertas, pero el triple de Simons ponía por fin por delante al Obra. El partido se enredaba en pérdidas constantes por ambos bandos, con el Obra obligado a lanzar tiros forzados sobre el límite de posesión y sufriendo en defensa ante el regreso a pista de Shengelia y Poirier, con de Zeeuw y Brodziansky en serias dificultades. Otra pérdida más que provocaba otra canasta fácil más ponía al Baskonia 5 arriba (24-29), pero el tiempo muerto y el regreso a cancha de Llovet le daban nuevo aire al equipo, a partir de la enorme porfía del catalán en el rebote ofensivo. El Obra se rehacía a base de defensa y sufriendo al máximo cada punto anotado, pero dejaba sin anotar a un Baskonia que seguía negado en el triple durante más de 3 minutos, y con un parcial de 7-0 culminado por Hlinason a pase del incansable Llovet recuperaba el mando en el marcador (31-29). El Obra compensaba sus excesivas pérdidas y los ataques sin claridad de ideas con el ya 0 de 10 en triples del rival y un dominio abismal en el rebote (alucinante 22-9), por lo que una canasta bien trabajada de Singler en el poste bajo y por fin una continuación entre Sàbat y Hlinason permitían al Obra llegar al descanso con 2 puntos de ventaja (35-33).

Sàbat inauguraba el tercer cuarto con un triple para el +5 local (38-33), pero el triple de Shengelia en el undécimo intento visitante dejaba claro que el Baskonia iba a reaccionar tarde o temprano. El Obra se la jugaba a triples con todas las consecuencias, sin meter más balones dentro, con Sàbat anotando otro triple más, ahora abierto en transición, lo que le servía para seguir por delante a pesar de que cada ataque en 5x5 era un suplicio infructuoso. Un par de libres de Singler lanzaban al Obra 7 arriba (43-36), pero los vitorianos regresaban aprovechando otro par de pérdidas más de los nuestros, con esas canastas fáciles en contraataque que seguían castigando tanto. Kostas tiraba del carro en ataque con más ganas que acierto, pero los grandes del Baskonia ponían de nuevo por delante a los vascos (45-47). Sàbat sí estaba acertado en el tiro, anotando su tercer triple del cuarto desde el frontal, y también Kostas conseguía acertar con el triple para mantener al Obra en la lucha ante el imparable dúo Huertas-Shengelia y la cuenta creciente de balones perdidos y canastas fáciles concedidas al rival (51-54). Un casi triple de Max de Zeeuw daba inicio a la reacción obradoirista. Un tiro libre de 2 anotado por Brodziansky y un par de triplazos consecutivos de Obst, a pesar de otra virguería más del inspirado Huertas, devolvían al Obra la delantera al final del cuarto, con 4 puntos de ventaja (60-56).

Simons robaba y anotaba en bandeja al contraataque para lanzar al Obra 6 arriba en el inicio del período final (62-56), asumiendo la responsabilidad ofensiva del equipo en esta fase del juego. Huertas culminaba con otro canastón el enésimo contraataque tras robo del Baskonia, pero Simons penetraba para una complicada bombita ante Shields respondida con un triple por el protagonista del partido, el gran Huertas. El ataque del Obra era desesperante, culminado con tiros lejanos y forzados sobre el límite de posesión, ante un Baskonia que seguía sumando de la mano de Huertas, ahora destrozando a Obst y culminando otro contraataque fácil más. El Obra era intenso atrás, pero llevaba ya más de 4 minutos sin anotar mientras la ventaja baskonista se iba a los 9 puntos tras acumular un parcial de 2-17 (64-73). El Obra luchaba, pero tampoco le entraban un par de triples librados y la espesura en ataque se volvía a evidenciar con otra posesión más agotada sin tirar a canasta. Un par de libres de Kostas tras una inocente antideportiva de Diop, un tapón de Hlinason a Huertas y una trabajada canasta de Llovet a pase del islandés daban un mínimo aire al equipo, todavía 5 abajo a falta de menos de 3 minutos, pero Granger y, cómo no, Huertas, sentenciaban a los nuestros con sendos triples para regresar al +9 (68-79). Simons simbolizaba el espíritu de no rendición del Obra con un par de triples en el minuto final, ya sin opción alguna de triunfo, y el partido moría sin remedio con la impotencia de haber competido durante muchos minutos pero sin poder llegar a buen puerto finalmente (74-81).

Datos a destacar
  • ya en condiciones normales era un partido muy complicado (solo se ha ganado al Baskonia una vez en ACB), pero la baja de Pozas lo ponía más difícil todavía. Sin embargo, el equipo peleó y tuvo sus opciones durante muchos minutos, a pesar de los evidentes problemas en la creación de juego, todo a base de espíritu colectivo y de hacerle difícil el partido al rival. No fue suficiente para llegar al final por delante, pero no se le puede restar mérito al trabajo del Obra
  • 18 pérdidas, y muchas de ellas además propiciando canastas fáciles del rival, son demasiada concesión a un rival que se permitió el lujo de no anotar triples en toda la primera mitad y aún así mantenerse en partido hasta que los triples acabaron por entrar (6 de 11 triples tras el descanso). Un Huertas estelar (24 puntos en 25 minutos), bien secundado por Shengelia, fue demasiado para los nuestros, que nunca encontraron la mínima continuidad en ataque para aprovechar sus buenos momentos atrás
  • en la primera aún hubo equilibrio interior/exterior en ataque (14/15 en tiros de 2/3), pero tras el descanso el equipo se la jugó a triples de manera continua, muchas veces más por obligación que por intención real de hacerlo (8/18 en tiros de 2/3). En 5x5 apenas hubo opciones claras, y al final había que intentar lanzamientos en el último momento, evidentemente con bajos porcentajes. Solo en transición pudo el Obra anotar de vez en cuando, insuficiente cuando el rival apretó en el tramo final
  • gran trabajo en el rebote, una de las mayores lagunas de partidos pasados. El equipo cerró muy bien el aro propio (solo 5 rebotes de ataque del Baskonia), en especial en la primera mitad (22-9 hasta el descanso), y cargó el rebote ofensivo con acierto para conseguir segundas opciones en esos 2 cuartos. Tras el descanso el Baskonia no concedió ya tantas ventajas: de hecho, no concedió un solo rebote ofensivo más el Obra, y ahí se cerró una de las pocas fuentes ofensivas de los nuestros
  • KOSTAS VASILEIADIS: le puso muchas ganas, intentó tirar del carro cuando el atasco era más evidente, dobló buenos balones en la primera mitad y sacó varias faltas en momentos de sequía para ir manteniendo vivo al equipo en ataque. Se tuvo que jugar varios tiros a la desesperada que estropearon su porcentaje (3 de 10 triples), y en defensa lo pasó mal como suele en el 1x1 con jugadores más rápidos. Claros y oscuros para el griego, pero siempre sin borrarse y queriendo ayudar. 15+4+5+2 en 29 minutos, con 4 faltas provocadas, para 19 de valoración
  • ALBERT SÀBAT: en la parte positiva está su acierto en el triple (4 de 8). En lo menos bueno, la espesura del equipo en ataque y la falta de ideas bajo su dirección, aderezada con varias pérdidas. En defensa sufrió lo indecible en el 1x1, primero con Granger y después con un Huertas que aprovechó la oportunidad. El catalán lo intentó siempre, pero la sombra de Pozas fue demasiado alargada durante el partido. 12+1+5 en 28 minutos, con 3 pérdidas, para 13 de valoración
  • KYLE SINGLER: correcto en la primera mitad, ayudando mucho en defensa en intangibles y apareciendo muy poco en ataque pero con éxito en el poste bajo. Tras el descanso solo intentó un par de triples sin éxito y desapareció de la escena sin apenas minutos. Una vez más, muy poco para lo que se esperaba de él cuando se fichó. 7+2+1 en 19 minutos, para 6 de valoración
  • NACHO LLOVET: durísima tarea para el catalán en defensa, emparejado con uno de los mejores de Europa en su puesto, un Shengelia que se lo puso muy difícil. Llovet no se arrugó a pesar de todo y fue clave en la arrancada del equipo en el tramo final del segundo cuarto, llevándose los rebotes en ambos aros y aportando su dureza habitual en toda la cancha. Buscó con éxito el juego entre pivots, pero el ataque a triples tras el descanso le quitó protagonismo ofensivo. 6+9 (4 en ataque)+2 en 25 minutos, para 14 de valoración
  • TRYGGVI HLINASON: siempre peca de inocente y pardillo con pérdidas tontas y despistes defensivos (algún pick and roll de Poirier), pero el islandés estuvo muy activo en ataque en la primera mitad, donde anotó sus puntos, fue bien al rebote y cambió muchos tiros interiores rivales. Tiene mucho que mejorar, eso está claro, pero el potencial de trabajo que atesora es enorme. 12+3+1 en 28 minutos, para 7 de valoración
  • BEN SIMONS: asumió responsabilidades en ataque cuando estuvo en cancha, con buena mano en el triple (3 de 6) y sumando en un par de buenas canastas tras el descanso. No se rindió hasta el final, con esos 2 triples en el último minuto, anotando puntos muy necesarios para un equipo muy necesitado de anotación. Buenas noticias para próximos partidos. 13+2 en 16 minutos, para 10 de valoración
  • ANDY OBST: muy gris, con pérdidas de balón demasiado inocentes y problemas atrás en el 1x1. De repente, un minuto de inspiración, con un par de triples, lo puso en órbita, pero de nuevo volvió a su tono apagado. Irregularidad máxima, por tanto. -12 con él en cancha, el peor del equipo. 6+1 en 15 minutos, para 5 de valoración
  • VLADI BRODZIANSKY: mal día para el eslovaco, que nunca encontró su lugar en la cancha. Mal en ataque y no demasiado bien en defensa (aunque peleó con ganas el rebote), tuvo muy pocos minutos y quizás no mereció más. Cosas de ser un rookie. 1+3 en 14 minutos, para 2 de valoración
  • DAVID NAVARRO: tuvo que ejercer de base por la ausencia de Pozas y cumplió como pudo, sobre todo sin perder balones. Mejor en transiciones que en la espesura del 5x5, no miró al aro y sufrió en sus carnes varias de las diabluras de Huertas. 0+2+5 en 13 minutos, para 7 de valoración
  • MAX DE ZEEUW: sigue muy lejos de lo que parecía que podría dar. El belga cerró bien el rebote, pero en ataque tuvo que hacer varios tiros desesperados sobre el límite de posesión y tampoco recibió balones de calidad para poder hacer algo en la pintura. En defensa muchos problemas y faltas muy rápidas. 2+4+1 en 13 minutos, para -1 de valoración
El Obradoiro estuvo en partido hasta entrado el último cuarto, pero le faltó algo más para poder pelear por el triunfo ante un Baskonia muy superior en calidad y que al final hizo valer el peso de la lógica de la mano de un genial Huertas. El parón por la nueva ventana FIBA llega en buen momento para los nuestros, con la imprescindible recuperación de Pepe Pozas por delante y un cierto reordenamiento de ideas, sobre todo en un ataque en 5x5 que lleva varios partidos siendo tan espeso como desacertado. El Obra está ahora mismo más o menos donde le corresponde estar, en la zona baja y por suerte con una mínima renta sobre los últimos clasificados, y ahora le toca rearmarse con un par de semanas de buenos entrenamientos de cara a un mes de diciembre en el que tiene que hacerse muy fuerte en Sar para evitar caer a los puestos de descenso. La mejora física de varios de los tocados y la limpieza de mentes de cara a los próximos partidos se verán beneficiadas con este parón.


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