La primera en el bolsillo (76-73)

Dragan Bender (foto: ACB Photo)

El Obradoiro se llevó el primer partido de la temporada en Sar ante un Zaragoza que apretó el marcador en el tramo final pero estuvo en todo momento por debajo de los locales. Los de Moncho Fernández fueron pro delante desde el principio, con Paige acertado en ataque y un rival horroroso en el triple y casi aún peor en los tiros libres. La entrada en cancha de Bender, con 10 puntos casi seguidos, abría brecha para el Obra entre el final del primero y el comienzo del segundo cuarto, aunque el equipo se apagaba en un mar de pérdidas y los arreones rivales apretaban el partido al descanso (40-37). Bender lideraba la salida del Obra en el tercer cuarto para, con la ayuda de un buen Blazevic que le tomaba el relevo, devolver las ventajas hasta un interesante +15 (54-39). De nuevo las pérdidas y los fogonazos de Sant-Roos para los visitantes reducían la ventaja local hasta los 4 puntos al comienzo del último cuarto (60-56), pero los triples de Paige y Walker mantenían las ventajas obradoiristas y una buena canasta de Bender permitía al equipo llegar con 7 de ventaja al minuto y medio final (72-65). La lucha de los visitantes no conseguía poner en aprietos el resultado y el goteo de tiros libres mantenía al Obra por delante sin sufrir en exceso, certificando así el primer triunfo de la temporada (76-73).

Gran entrada en Sar para ver el debut del Obradoiro en esta temporada 22/23, la primera tras dejar atrás todas las limitaciones de la pasada pandemia. Zaragoza comenzaba el partido con Ferrari, Jessup, Sant-Roos, Simanic y Mekowulu. Moncho Fernández, con toda la plantilla disponible, optaba de inicio por Westermann, Paige, Thomas Scrubb, Vicedo y Blazevic. El partido comenzaba con mucho desacierto en el tiro, aunque los nuestros golpeaban algo mejor y de la mano de Westermann y un Paige incisivo con 5 puntos se anotaba las primeras rentas favorables. Zaragoza se mostraba negado desde el triple y el Obra se iba 8 arriba tras la penetración de Phil Scrubb (11-3). Con ambos equipos enredados en una pelea infructuosa de cara al marcador, la entrada de Lomasz por los visitantes reducía diferencias, aunque Guerrero se resarcía de un par de pérdidas peleando buen el rebote de ataque para anotar al segundo intento. La entrada en juego del esperado Bender ofrecía resultados inmediatos, con el croata anotando 4 puntos de tiro libre y una buena suspensión de 4 metros, ante un rival en el que Lomasz acertaba por fin desde la línea de 6,75. De nuevo Bender, tras el pase palmeado al cargar el rebote ofensivo del trabajador Guerrero, machacaba el aro visitante para cerrar el cuarto con unos interesantes 10 puntos de ventaja (21-11).

Dragan Bender seguía sumando en el inicio del segundo cuarto, tras una gran combinación entre Westermann y Blazevic para la asistencia del lituano. El propio Blazevic anotaba bajo aro en otra buena acción para el +12 (25-13), aunque Bender perdía el balón y cometía su segunda falta, yéndose prematuramente al banquillo. La diferencia parecía estabilizada, con un rival muy fallón en el tiro pero cargando mucho por dentro, aunque el Obra comenzaba a perder balones de manera preocupante y a cargarse de faltas que Zaragoza solo aprovechaba a medias desde la línea de libres. Un buen triple de Vicedo elevaba la máxima renta del Obra al +13 (30-17), pero los rebotes ofensivos del rival se sumaban a la lista creciente de problemas. El nuevo triple de Paige devolvía el +12 a los nuestros, pero el atasco del equipo empezaba a ser claro y las pérdidas permitían puntos fáciles de Yusta y Ferrari que reducían distancias a pesar del buen trabajo de Thomas Scrubb en su bonito duelo personal con un efectivo Santi Yusta. El retorno de Westermann a la dirección no parecía surtir efecto y el Obra iba perdiendo la renta adquirida en los minutos precedentes ante un rival que, a pesar de su bajo nivel en el tiro libre, ganaba muchos rebotes ofensivos y por fin encontraba un fogonazo de acierto exterior para ponerse a tan solo 1 punto (38-37). Un par de libres de Rubén Guerrero mantenían a los nuestros con una pequeña ventaja de 3 puntos al llegar al descanso (40-37).

Una entrada de Paige a pase de Westermann y un triple de Bender en transición abrían las hostilidades tras el paso por los vestuarios. Blazevic trabajaba bien el 1x1 con Hlinasson para sacarle la falta y anotar los libres, y tras un robo de Westermann llegaba el triplazo lateral en transición de Thomas Scrubb para lanzar al Obra 11 arriba y forzar el tiempo muerto visitante (50-39). Ni siquiera la tercera falta de Bender tras un nuevo rebote ofensivo zaragozano frenaba a un Obra en el que de nuevo Blazevic jugaba de espaldas para anotar ante Mekowulu. También Westermann cometía su tercera falta, pero Blazevic continuaba trabajando en la pintura y siendo bien buscado por sus compañeros para poner 15 arriba al Obra (54-39). Bender cometía en ataque su cuarta falta, yéndose al banco, pero el Obra ahogaba al ya de por sí espeso ataque rival y Guerrero anotaba con facilidad bajo aro a pase de Phil Scrubb. Los visitantes se acercaban un poco a base de pelear bajo aros y percutir con más corazón que cabeza, con los nuestros contagiándose del descontrol. Thomas Scrubb devolvía el +10 con un canastón a aro pasado y Vicedo anotaba tras pelear entre él y Blazevic por el rebote ofensivo, aunque los buenos minutos de Sant-Roos iban acercando poco a poco a los visitantes y dejaban una diferencia de 7 puntos al final del cuarto (60-53).

La ventaja del Obra se quedaba en solo 4 puntos tras otra pérdida y canasta fácil de Sant-Roos en el inicio del último cuarto (60-56), aunque Paige regresaba con un triple que daba aire a los nuestros. Westermann no tenía definitivamente el día en sus tiros y Blazevic volvía a perder balones inocentes ante un rival que de todos modos seguía regalando tiros libres de manera escandalosa. David Walker aparecía en el momento más complicado con un triple y un robo, pero el partido estaba en un puño con ambos equipos atascados y cometiendo errores. Más de 2 minutos y medio de parón en el marcador eran rotos por Paige con una suspensión corta en medio del correcalles, aunque el triple de 8 metros de Lomasz volvía a apretar las cosas. Con ambos equipos rivalizando en precipitaciones muy propias de este inicio de temporada, el Obra aguantaba en el intercambio de tiros libres y Bender daba un respiro con una canasta trabajada remontando línea de fondo de Bender para el +6 a falta de solo 2 minutos. Un tiro libre de Blazevic elevaba la renta a 7 a falta de minuto y medio (72-65), con Zaragoza encontrando demasiado tarde los triples que antes no había anotado. Los tiros libres permitían a los nuestros amarrar la victoria en un interminable intercambio de tiempos muertos en los segundos finales, que a pesar de los esfuerzos rojillos no conseguían poner en riesgo el triunfo final del Obradoiro (76-73).

Datos a destacar

• partido típico de principio de temporada, con muchas cosas que trabajar por ambos bandos y juego a tirones y con poca continuidad. Dentro de esos lógicos parámetros, el Obradoiro supo sacar mayor partido del talento ofensivo de sus mejores hombres y fue por delante desde el primer minuto, aunque no acabó de sostener un par de rentas interesantes y terminó sufriendo hasta el final
• muchas pérdidas (16-8), flojedad en el rebote defensivo (45-38 en general, pero 15 en ataque para Zaragoza), sufriendo en ocasiones ante la capacidad física de un rival superior en dicha faceta. A cambio, el Obra movió mejor el balón para buscar ventajas con los interiores y encontró acierto exterior en momentos de dificultad. La rotación fue larga y no siempre funcionó, pero el equipo dio sensación de tener muchos recursos en el banquillo y de poder repartir mucho las responsabilidades en ataque
• defensivamente, y con los problemas en el rebote ya mencionados, buena actitud colectiva y éxito por momentos en las trampas defensivas. Despistes de vez en cuando, como es normal a estas alturas, pero nuevamente una sensación de que el equipo puede rendir a buen nivel en esta faceta
• DRAGAN BENDER: destellos de enorme calidad del croata, a pesar de que las faltas limitaron mucho sus minutos en cancha. En cuanto saltó a cancha comenzó a producir, sacando con irregular acierto su buena mano desde fuera y mostrando algún buen movimiento en la pintura. En defensa cumplió aunque quizás estuvo algo blandito en alguna ocasión, y en general dio una impresión muy positiva y con mucho margen de mejora por delante. Esperanzador debut, sin duda. 16+6 en solo 17 minutos, para 15 de valoración
• LEO WESTERMANN: luces y sombras para el francés, sólido en la dirección pero muy fallón en tiros que normalmente está capacitado para anotar (1 de 7 en tiros de campo). No acabó de sacar rendimiento de sus ventajas físicas en el poste bajo (aunque el entrenador rival le puso encima a Sant-Roos en muchas ocasiones para evitar eso), pero a poco que afine la puntería tiene que ser un jugador importante en el equipo. 2+4+4 en 25 minutos, para 4 de valoración
• MARCUS PAIGE: con algo de precipitación en el 1x1 y los pases en ocasiones, pero aún así sacando su buena mano para el triple y las penetraciones, rapidísimo de ejecución y sin miedo en los momentos calientes. Buenas decisiones en el tiro (3 de 4 en triples y también en tiros de 2) y cosas muy positivas en su presentación ante la afición. 17+0+1 en 25 minutos, con 5 pérdidas, para 10 de valoración
• THOMAS SCRUBB: en su línea de la pasada temporada, aportando de manera puntual en ataque (penetraciones y un buen triple lateral en transición) y ayudando en defensa con energía. Bonito duelo durante unos minutos vibrantes con Santi Yusta en el que acabaron igualados, y de nuevo líder del equipo en minutos en cancha, como solía ocurrir el curso anterior. Sólido y siempre sumando. 11+3+1 en 27 minutos, para 13 de valoración
• EDGAR VICEDO: trabajo oscuro del madrileño, muy trabajador en el rebote e intentando cosas en ataque aunque con acierto desigual. Alargó la rotación manteniendo el tono del equipo, aunque a veces sufrió ante la potencia física de sus rivales. 5+6 en 20 minutos, para 5 de valoración
• MAREK BLAZEVIC: todavía muy bisoño en ciertos momentos (faltas, pérdidas), pero mostrando unas maneras en la pintura muy interesantes. El equipo lo buscó con acierto en ciertos momentos y el lituano cumplió, aunque también sufrió en ocasiones ante el enorme Hlinasson. En defensa se fajó con ganas, aunque a veces se perdió en algún cambio, pero sin duda hay calidad y potencial para esperar grandes cosas de este jugador. +18 con él en cancha, el mejor del equipo. 10+8+1 en 25 minutos, con 4 balones perdidos y 6 faltas provocadas, para 10 de valoración
• PHIL SCRUBB: no tuvo acierto en el tiro pero no perdió balones como director de juego. El equipo se atascó bajo su mando en ocasiones (también era cosa de los compañeros con los que estaba en cancha), pero el canadiense aprovechó a cuentagotas sus conocidas virtudes para sumar en los tiros libres finales y cerrar el triunfo. 5+2+2 en 22 minutos, con 4 faltas provocadas, para 5 de valoración
• DAVID WALKER: algo tímido de inicio, el alero norteamericano se dedicó más a hacer el trabajo oscuro que a intentar cosas por su cuenta. Sin embargo, una reacción suya con un triple y un robo fue clave para que el equipo evitara más apuros en el último achuchón rival mediado el cuarto período. Otro jugador que será muy importante para mantener el nivel en la rotación y hacerla muy larga en cuanto a físico y calidad. 3+4 en 18 minutos, para 10 de valoración
• RUBÉN GUERRERO: algo torpe en las pérdidas pero con capacidad de hacer cositas en la pintura y cargar mucho el rebote en ambos aros. El malagueño sufrió los peores momentos del equipo (-14 con él en cancha), pero también dejó claro que puede ayudar mucho al equipo y que incluso en un partido mejorable hace números con facilidad. Como jugador de rotación, otro de los que ha de alargar al equipo de manera notable. 7+6 en 14 minutos, para 6 de valoración
• FERNANDO ZURBRIGGEN. participación testimonial del argentino, con problemas para mover el ataque del equipo en sus pocos momentos en cancha. 0+0+1 en 4 minutos, para -1 de valoración
• ÁLEX SUÁREZ: todavía menos tiempo en cancha estuvo el balear, que se cargó de faltas en tiempo record y no pudo aportar más. 0+1 en 3 minutos, para -2 de valoración

Primer partido, primera victoria. El Obradoiro sumó y mostró más cosas buenas que malas en un momento de la temporada en que todo está cogido con alfileres. La largura y la versatilidad de la rotación es lo mejor que parece tener este equipo, y la presentación de jugadores como Bender, Blazevic o Paige ha sido muy esperanzadora. Hay muchos meses por delante y a estas alturas pocas conclusiones se pueden sacar, pero la sensación de que hay mimbres para hacer un buen cesto es evidente. Mientras tanto, victorias como la de este debut son las que han de generar la confianza y la tranquilidad precisas para trabajar con calma y sin agobios.