 |
| Kassius Robertson (foto: ACB Photo) |
El Obradoiro dilapidó el trabajo de una enorme segunda mitad para regalar el partido en 2 minutos finales desastrosos, encajando un terrorífico parcial de 0-11 que llevó a una derrota final por 4 puntos (83-87). Los de Moncho Fernández comenzaron más acertados que su rival (12-6), aunque la entrada en cancha de un inspirado Pau Ribas cambió el rumbo del partido a base de triples. El Obra fue a remolque durante todo el segundo cuarto, cosido a triples y sin encontrar el ritmo en ataque, yéndose 8 abajo al descanso (32-40). En el tercer cuarto cambió de nuevo el panorama, con una defensa obradoirista dura e intensa que apenas permitía tirar a canasta a los verdinegros, mientras en ataque se buscaba con acierto a Birutis y los triples iban entrando poco a poco. Con Pepe Pozas liderando la remontada en ambos lados de la cancha, el Obra se enganchaba al partido, cada vez más fuerte en defensa, y se ponía por fin por delante hacia el final del período, con Muñoz destacando entre los hombres de rotación (59-55). La aparición de Robertson en el cuarto período decantaba el igualado duelo entre Tomic y Birutis hacia el bando local, con una ventaja de 7 puntos a falta de 2:45 (83-76). A partir de ahí llegó el inesperado hundimiento, con 2 triples visitantes, un cúmulo de errores en canastas fáciles y, sin saber casi cómo, una derrota sentenciada con el triple final de Ventura para cerrar un 0-11 letal. Con esta nueva derrota, la séptima consecutiva, el Obradoiro se sigue descolgando en la tabla con un record de 5-9.
Ganas de recuperar el sendero del triunfo en el partido aplazado a principios de noviembre que por fin se jugaba. El Joventut comenzaba las hostilidades con Dimitrijevic, Ventura, López-Aróstegui, Morgan y Tomic. El Obradoiro, con Álex Suárez en la convocatoria pero sin saltar todavía a cancha, lo hacía con Pozas, Robertson, Muñoz, Cohen y Birutis. Le costaba de entrada al Obra acertar en ataque, con una Penya muy activa e intensa atrás, sin permitir balones para Birutis y con Robertson muy marcado por Ventura. Muñoz anotaba una buena suspensión de 5 metros liberada y el equipo aprovechaba las equivocaciones del alocado Dimitrijevic para meterse de nuevo en el partido, con Cohen anotando un buen triple. Las defensas podían con los ataques y las pérdidas verdinegras permitían al Obra remachar un parcial de 10-0 tras una penetración de Pozas y un triple de un muy acertado Álvaro Muñoz, que además frenaba en defensa a López-Aróstegui (12-6). La entrada en pista de Oliver era aprovechada por Bassas para sacar de la sequía a los suyos, aunque Robertson por fin encontraba un buen tiro de 5 metros para estrenarse en ataque. La aparición en el partido de Pau Ribas con 2 triples, unida al atasco ofensivo de los nuestros, con malos pases y pérdidas, devolvía el parcial al Obra con un 2-12 (14-18) cortado por un triple de Mike Daum, al que respondía igualmente Ferran Bassas para cerrar el cuarto con ventaja visitante de 4 puntos (17-21).
El Obra seguía atascado en el inicio del segundo cuarto, con Enoch muy perdido en sus acciones en ambos lados de la cancha, castigado por el joven Birgander. Con Pau Ribas sembrando el pánico en nuestra defensa, una buena canasta jugando desde el poste bajo de Czerapowicz y un triple lateral de Beliauskas daban aire a los nuestros, pero Moncho Fernández tenía que recomponer el quinteto inicial antes de lo esperado. El segundo triple de Álvaro Muñoz era respondido al instante por el genial Ribas, además por partida doble.. El Obra resistía al filo del alambre con otra buena suspensión lateral de 4 metros de Beliauskas, pero los visitantes seguían martilleando desde el 6,75 sin piedad y se iban ya 9 arriba (27-36). Un bravo Pepe Pozas lideraba el esfuerzo defensivo con un robo, lanzando al contraataque para la bandeja de Beliauskas, aunque las faltas lo llevaban al banquillo de nuevo. Con ambos equipos ya en bonus, el intercambio de tiros libres apenas alteraba la dinámica del partido, que se iba al descanso con una renta de 8 puntos para el Joventut (32-40).
La vuelta de los vestuarios veía a un Obradoiro que iba a por todas desde el primer instante. Un triple de Cohen y, por fin, la primera canasta de Birutis, metían de lleno a los nuestros en la lucha. Nuestra defensa subía varios puntos en presión e intensidad, con Pozas maniatando a Bassas, aunque Robertson no conseguía encontrar el camino del aro en sus forzados intentos. Muñoz proseguía con su notable labor anotando otro triple más, con Birutis ya generando espacios ante la defensa de un Birgander que no podía con el lituano más que a base de faltas. El impulso que faltaba lo daba Pepe Pozas, que tras clavar un buen triple frontal robaba el balón a Bassas y le forzaba falta intencionada, aunque solo anotaba uno de los libres. La Penya todavía resistía a pesar de la aportación de Birutis, que seguía sumando en ataque bien alimentado por el movimiento de balón del equipo, ahora comandado por Oliver. La cuarta falta del base catalán hacía entrar en cancha a Rafa García, que con su dinamismo generaba confusión en la defensa verdinegra. Daum anotaba al tercer intento bajo aro para por fin empatar el partido, Muñoz anotaba una bombita corta frontal y Beliauskas clavaba un triple que ponía al Obra 4 arriba (56-52), compensando el aporte ofensivo de un Tomic que comenzaba a despertar. Un triple de Cohen cerraba el gran cuarto del equipo para mantener ese interesante +4 en el marcador (59-55).
Tomic era el sostén visitante ante un Obradoiro que mantenía su esfuerzo defensivo al máximo nivel en el comienzo del cuarto período. Birutis ya no producía con la misma facilidad ante el croata, pero quien aparecía para lanzar a los nuestros era un Kassius Robertson que por fin podía levantarse para clavar un triplazo de los suyos. Pozas, omnipresente en su retorno a cancha, se cruzaba por la zona para robar un pase a Tomic, lanzaba el contraataque y asistía para otro triplazo más en transición de Robertson que ponía el +6 en el luminoso (65-59). Birutis conseguía equilibrar el duelo con el gran Tomic con un par de buenas acciones que le daban 2 libres anotados y un buen ganchito corto, mientras Pozas aguantaba con sus 4 faltas para llevarse un rebote y lanzar otra nueva transición en la que asistía para el triple lateral de Daum. La vuelta a cancha de Ribas, con otro triple más, volvía a equilibrar el marcador, pero el Obra repetía buena lectura de juego y calcaba jugada para que Daum clavase un triple más desde la esquina. Ribas generaba para sí y para un Tomic que colaboraba para la causa de los suyos, aunque el Obra se mantenía 6 arriba tras 2 tiros libres anotados por Robertson. Tras el triple liberado de Bassas después de un 2 contra 1 del Obra algo arriesgado, una pérdida en ataque propiciaba el contraataque de Ventura, que sin embargo recibía una discutida falta en ataque sobre la defensa de Pozas. De una canasta hecha para ponerse a 1 punto, los visitantes se veían 7 abajo tras anotar Robertson el tiro libre de la técnica a Carles Duran y, en el ataque siguiente, un triplazo enorme que dejaba el partido a punto de caramelo para el Obra, con solo 2:45 por delante (83-76). El Obra cedía un rebote defensivo vital que acababa en triple visitante, mientras en el otro lado de la cancha Daum erraba incomprensiblemente un balón caído del cielo bajo aro tras el forzado triple de Muñoz sobre la bocina de final de posesión. Pau Ribas, cómo no, clavaba su sexto triple de la noche para bajar a 1 la ventaja de los nuestros, mientras Robertson se jugaba un triple muy forzado desde el lateral que se clavaba en el aro y, cambio de posesión mediante, le daba al Joventut balón para ponerse por delante tras menos de 1 minuto de locura en la cancha. Ribas, ya dueño del partido, cortaba para regalarle un balón perfecto a Tomic, con lo cual el Obra entraba, de manera inverosímil, 1 abajo en el minuto final. Birutis recibía dentro pero era blando en su acción y fallaba un ganchito corto, aunque tras una buena defensa recuperábamos balón. Pozas se iba en penetración con claridad y dejaba la bandeja, pero el balón rebotaba en el aro, se salía, a falta de 14 segundos, y el Joventut movía el balón con rapidez para evitar la desesperada falta de los nuestros, con el remate final del triple de Ventura para remachar un alucinante 0-11 de parcial que dejaba helado a un Obradoiro incapaz de entender qué había ocurrido. Ni siquiera con el rival dejando hacer acertaba Daum para anotar el palmeo solo bajo aro en las 2 décimas que quedaban, certificando el sorprendente y doloroso 83-87 final.
Datos a destacar
- increíble final. El Obradoiro había dado un recital de trabajo duro en defensa para remontar un partido muy complicado y lo tenía casi hecho, 7 arriba a falta de 2:45. A partir de ahí todo lo que podía salir mal lo hizo, y una mezcla de mala suerte, errores absurdos y locura generalizada tiró por tierra todo el esfuerzo y todo el acierto del resto del partido
- hasta esos minutos finales, el Obra había pasado de ser acribillado a triples por el dúo Ribas-Bassas a ser capaz de colapsar el ataque verdinegro con una presión espectacular y un gran trabajo colectivo. La lectura en ataque en la segunda mitad fue muy buena, buscando a Birutis y encontrando el acierto triplista (48% en triples al final, aunque el Joventut también tuvo el mismo porcentaje). Algunos rebotes defensivos concedidos fueron finalmente claves para que el Joventut llegara vivo al tramo final (24-33 en rebotes), pero aún así el triunfo estaba en las manos de los nuestros
- buen trabajo táctico y aportación de jugadores de rotación. La defensa fue muy buena, especialmente tras el descanso, forzando pérdidas y obteniendo canastas fáciles tras robo (13-20 en pérdidas). Durante muchos minutos el rival apenas encontró opciones de tiro, con ayudas, trampas defensivas y una gran actividad colectiva que habría merecido verse recompensada con el triunfo final
- LAURYNAS BIRUTIS: le costó mucho entrar en el partido, sin recibir balones durante una primera mitad en la que ni él ni Tomic aparecieron en juego apenas. Tras el descanso, sin embargo, el equipo empezó a buscar ángulos de pase y el lituano comenzó a producir de manera continua ante Birgander, aunque ya con Tomic equilibraron fuerzas. Le faltó contundencia en alguna acción tanto ofensiva como defensiva en el tramo final, pero aún así sumó números de calidad. 13+6+1 en 33 minutos, con 7 faltas provocadas, para 18 de valoración
- PEPE POZAS: enorme partido del malagueño, principal impulsor de la reacción del equipo para la remontada que pareció definitiva. Pozas defendió, robó, corrió y asistió, e incluso asumió un par de tiros con acierto, llegando por momentos a desquiciar al equipo rival con su actividad en la pista. Esa canasta en bandeja que se le salió (o le sacó Tomic) en los segundos finales impidió que se coronara como el merecido protagonista del triunfo. 6+1+4+3 en 26 minutos, con 5 faltas provocadas, para 12 de valoración
- KASSIUS ROBERTSON: lo pasó muy mal de inicio con un perro de presa como Ventura que le impedía siquiera mirar al aro. En defensa también sufrió en algunas jugadas, pero tras el descanso comenzó a generar, primero para sus compañeros y después a sumar puntos que parecían definitivos hasta los 2 minutos terroríficos finales. Ese último cuarto había compensado todos los problemas sufridos hasta entonces por el canadiense, que de todas formas estuvo errático en ciertos momentos (1 de 6 en tiros de 2). 14+2+3 en 27 minutos, para 10 de valoración
- ÁLVARO MUÑOZ: salió de titular y jugó, de lejos, su mejor partido con el Obra en muchos meses. El madrileño secó a López-Aróstegui, aportó en ataque con calidad y buenas decisiones y colaboró en el gran trabajo defensivo global de la segunda mitad, siendo clave en el buen movimiento de balón del ataque obradoirista y ejecutando él mismo cuando era necesario. Junto con Pozas, otro que no se mereció ese final tras una actuación tan notable. 13+2+4 en 30 minutos, para 14 de valoración
- JAKE COHEN: partido extraño del israelí, alternando aciertos notables (3 triples, buen trabajo defensivo) con errores tontos bajo el aro (0 de 3 en tiros de 2). Sumó más de lo que restó (+8 con él en cancha, máximo del equipo), pero esa falta de explosividad física que tiene le penaliza mucho en sus acciones bajo el aro. Las faltas limitaron también mucho sus minutos en cancha. 12+3 en 20 minutos, con 4 faltas provocadas, para 4 de valoración
- MIKE DAUM: mejorando su rendimiento tras la lesión, el norteamericano sufrió en defensa en el segundo cuarto, aunque su aportación en la escapada casi definitiva del equipo, ya en el cuarto período, con 2 triples consecutivos, fue muy destacada. Esa canasta hecha que se perdió en el maremagnum final no fue la única, ya que Mike estuvo peleado con el aro en las distancias cortas, faltándole quizás aún ese punto de confianza que le restó la lesión. Sin embargo, poco a poco va llegando, esa es la mejor noticia. 13+5 en 23 minutos, para 10 de valoración
- LAURYNAS BELIAUSKAS: pocas pero buenas acciones en ataque, volviendo a tener acierto tanto en el triple como en sus habituales suspensiones de 4 metros. En defensa estuvo voluntarioso pero se comió algunas de las acciones del gran Pau Ribas, aunque en general volvió a mostrar el buen nivel del esperanzador comienzo de temporada. 10+2+2 en 18 minutos, para 8 de valoración
- ALBERT OLIVER: sufrió una enormidad para mantener el tipo en defensa, donde Bassas lo superó con facilidad y buscó las debilidades del veterano base obradoirista una y otra vez, haciendo que se cargar de faltas con mucha velocidad. En ataque movió bien el balón en ocasiones, aunque sin mirar al aro apenas. Duro -12 con él en cancha, el peor del equipo. 0+0+2 en 12 minutos, para -3 de valoración
- CHRIS CZERAPOWICZ: testimonial presencia del sueco en cancha, dejando la duda de si quizás tenía algún problema físico (más allá del partidazo que se marcó Muñoz). En sus pocas acciones en la pista se anotó una buena canasta interior y sufrió los malos momentos del equipo en el segundo cuarto. 2+1+1 en 5 minutos, para 3 de valoración
- STEVEN ENOCH: pocos minutos y ninguna acción positiva. No le ayudaron esos pases a los tobillos que le dieron, pero en esta ocasión el norteamericano anduvo despistado y sin encontrar en ningún momento su lugar en la cancha. 0+0 en 5 minutos, con 2 pérdidas, para -2 de valoración
- RAFA GARCÍA: las faltas de los bases forzaron su entrada en el partido al final del tercer cuarto, y el andaluz revolucionó el ataque con su dinamismo, rompiendo la defensa rival y generando buenas opciones de tiro para sus compañeros, sin perder balones ni conceder nada en defensa. 0+0+1 en 3 minutos, para 0 de valoración
0 comentarios:
Publicar un comentario