No lo cierra todavía (86-77)

Saiz y Pustovyi (foto: ACB FotoClick)

El Obradoiro no pudo dejar virtualmente certificada la permanencia al perder por 9 puntos en la cancha del Burgos. Los de Moncho Fernández comenzaron mandando en el marcador gracias al acierto de Sàbat desde los 6,75 y del mejor del equipo, de nuevo Bendzius (6-13), y aunque los locales consiguieron igualar el partido, otra vez el Obra dio un estirón al inicio del segundo cuarto con Navarro y Radovic al mando, hasta alcanzar una renta máxima de 9 puntos (20-29). El equipo se volvió a parar en ataque hasta el descanso, a pesar de los puntos de Sàbat (36-37), y poco a poco se fue yendo abajo en defensa en el tercer cuarto ante el enorme acierto de un Corey Fisher que martilleó sin piedad el aro obradoirista. Con las pérdidas de balón como peor enemigo (19 al final), el Obra se vio más de 10 puntos por debajo tras una racha de anotación de Deon Thompson (70-59), aunque consiguió regresar de la mano nuevamente de Bendzius (16+6 para 20 de valoración al final), llegando a ponerse a 2 a falta de menos de 3 minutos (74-72), pero los locales se agarraron de nuevo a Fisher para mantener el liderazgo y amarrar el triunfo final (86-77). Con esta derrota, el Obradoiro se queda en tierra de nadie con un record de 11-14, a 3 triunfos de playoffs y con 4 de renta sobre el triple empate por una plaza de descenso entre Bilbao, Burgos y Betis.

Volvía el Obradoiro a la ciudad donde ascendió hace ya casi 7 años, ante un equipo local muy necesitado de un triunfo y que comenzaba el partido con Fisher, López, Cancar, Thompson y Huskic, mientras los nuestros lo hacían con Sàbat, Thomas, Bendzius, Llovet y Pustovyi. Los locales comenzaban corriendo y anotando, y aunque Sàbat anotaba un triple lateral el inicio burgalés era fulgurante en ataque ante una defensa obradoirista algo floja y un ataque que empezaba a sumar pérdidas desde el principio (6-3). Matt Thomas comenzaba su particular mañana de pasión con una pérdida poco antes de irse al banquillo, pero el Obra reaccionaba con un buen ganchito corto de izquierda de Pustovyi ante Huskic y con el omnipresente Bendzius robando, subiendo y clavando el triple en transición. Burgos no acertaba desde el triple, pero Sàbat sí anotaba su segundo de la mañana y de nuevo Bendzius clavaba una suspensión corta tras cruzar por la pintura para cerrar un parcial de 0-10 y darle un buen +7 a los nuestros (6-13). Burgos volvía al partido al acertar por fin con un par de triples mientras el Obra sumaba otras 3 pérdidas en ataque que el mate de Pustovyi tras complicado pase de Sàbat no podía compensar. Schreiner presionaba mucho más a un Sàbat que empezaba con sus habituales problemas para subir el balón, y el partido se paraba un tanto ante la intensidad defensiva de ambos equipos. Llovet palmeaba a la tercera intentona tras cargar el equipo bien el rebote ofensivo, pero Radovic y Simons no acertaban en el tiro y el triple de Jenkins dejaba el partido empatado al llegar al final del cuarto (17-17).

El Obra empezaba muy bien el segundo cuarto, con un parcial de 0-7 en menos de 2 minutos de la mano de David Navarro, una canasta interesante al poste de Radovic y un buen triple de Simons (17-24). El Obra robaba en líneas de pase interiores con muy buenas ayudas y seguía moviendo bien en ataque de la mano de Pozas. El acierto en el triple, ahora por parte de Navarro, se unía al buen trabajo en el poste de Radovic para subir la renta a 9 puntos (20-29). La pelea entre Saiz y Pustovyi se iba equilibrando poco a poco pero el Obra seguía fuerte atrás y encontrando buenos balones en ataque, como el de Pozas para Pustovyi. Sin embargo, de nuevo los locales se rehacían al conseguir correr y cargar el rebote de ataque, aprovechando el nuevo parón ofensivo de un Obra que volvía a perder otro par de balones más ante la presión a media cancha burgalesa. El tiempo muerto de Moncho Fernández, a pesar del regreso de varios de los titulares a cancha, no conseguía parar una hemorragia que llegaba hasta completar un parcial de 10-0 que le daba de nuevo el liderazgo a los locales, aprovechando un 2+1 de un Huskic que volvía a superar a Pustovyi por velocidad (32-31). Sàbat sacaba faltas para mantener al Obra a base de tiros libres, aunque Spires sufría como casi siempre lo indecible en defensa en su breve aparición en pista. Un triple desde 8 metros sobre el final de posesión del inspirado Sàbat cerraba el segundo cuarto con la mínima ventaja obradoirista (36-37).

La vuelta tras el descanso traía un panorama de toma y daca en el marcador, con Pustovyi castigando en ambos aros a Huskic y Sàbat añadiendo un triple más, este afortunado a tabla, para compensar la ausencia anotadora de un Matt Thomas desconocido ante la defensa de Álex López (40-44). Un buen movimiento de balón local rematado en triple de Fisher daba inicio a otro parcial burgalés de 8-0, con el base local como protagonista ante un Obra en el que Thomas continuaba con su particular calvario (48-44). Bendzius contestaba desde los 6,75 tras el tiempo muerto de Moncho Fernández, pero el enrachado Fisher continuaba con el destrozo añadiendo otra canasta ante la impotencia de Sàbat, con otra técnica más por exagerar el contacto para los nuestros que suponía otro punto más. El Obra se agarraba al partido con un par de buenas acciones de Radovic de espaldas en la pintura, pero los triples de Fisher seguían haciendo mucho daño. Con Thomas desaparecido en combate, un par de libres de Sàbat daban paso a otro arreón burgalés de la mano de un Deon Thompson que superaba a un Radovic que se obcecaba fallando lo indecible tras coger varios rebotes ofensivos después de hacer lo propio con un par de libres tras recibir una antideportiva bajo el aro, y con Sàbat añdiendo varios intentos triples forzados fallados a la lista. Con el partido enmarañado en el terreno de la épica, Burgos seguía navegando mejor en aguas revueltas y se iba ya de 9 puntos (63-54), aunque un triple de Simons para cerrar el tercer cuarto dejaba al Obra todavía con opciones (63-57).

El Obra intentaba apretar el partido con una canasta de Simons desde 6 metros para ponerse a 4 (63-59), pero nuevamente los locales daban un estirón más de la mano de Deon Thompson, coincidiendo con el regreso de las pérdidas de balón a la ofensiva obradoirista. La tercera técnica para los nuestros, esta para Pozas por protestar los continuos palos de Schreiner, le daba un punto más desde la línea de libres a los locales para marcar una renta máxima de 11 puntos (70-59). El Obra cambiaba a defensa zonal con Bendzius en punta y Navarro como base, como intento de elevar la intensidad en la cancha, algo de lo cual los locales iban sobrados. Bendzius palmeaba y sumaba un 2+1 para liderar la reacción, pero Jenkins castigaba la defensa zonal con un triple que devolvía el +11 local (73-62). Los nuestros ya iban contra reloj pero los triples no entraban y solo con tiros libres no llegaba para remontar a pesar de los muchos rebotes de ataque ganados por los nuestros. La cuarta falta de Pustovyi tras muchos minutos en el banco era un problema, pero Bendzius salía al rescate del equipo forzando faltas y sumando otro 2+1 más tras una buena defensa del equipo. Otra gran defensa del Obra y un palmeo de Llovet ponían al Obra a solo 4 con más de 3 minutos y medio por delante, y otra canasta de Pustovyi en contraataque tras robo a 2 (74-72), pero un tiro afortunadísimo de Fisher desde el lateral daba aire a los locales cuando ya no lo tenían. Bendzius se dejaba otro tiro libre más por el camino y Huskic salvaba otro ataque complicado con una canasta salvadora. Un triple errado y otra pérdida en ataque, ahora de Radovic, daban paso a un triple de Fisher que sentenciaba a los nuestros definitivamente, entrando con 9 de ventaja en el último minuto (82-73). Radovic, peleando contra su propio desacierto, inflaba todavía más su curiosa estadística de rebotes de ataque en las últimas jugadas, pero los tiros libres de Jenkins y Fisher cerraban la victoria local y dejaban al Obradoiro en tierra de nadie en la tabla, sin cerrar aún del todo la permanencia (86-77).

Datos a destacar

• la intensidad. El Obradoiro dominó cuando consiguió llevar el partido más controlado y menos alocado, en el segundo cuarto especialmente. El rival se jugaba mucho más que los nuestros y cuando podía correr y subir la presión defensiva hizo mucho daño a los nuestros, que solo volvieron a la pelea cuando consiguieron en los minutos finales igualar esa intensidad con un cambio defensivo, pero no fue suficiente
• como siempre, las pérdidas de balón. En esta ocasión se fueron a 19, una cantidad inasumible para poder ganar partidos. La presión a media cancha local complicó mucho la vida a los nuestros, que solo cuando evitaron las temidas pérdidas (en el mencionado segundo cuarto) fueron dominadores claros del juego
• flojos en el tiro exterior, acusando el mal día de Thomas, ante un rival que empezó mal pero que con Fisher en tiros en transición rompió una defensa que se estaba cerrando muy bien en la pintura, anulando a Thompson. El acierto de Fisher abrió huecos para Thompson y llegó la ruptura, que ya el Obra no pudo recuperar a pesar de su superioridad reboteadora (32-44, con 19 rebotes ofensivos). El goteo de tiros libres fallados hizo el resto para no dar opciones para el triunfo obradoirista
• EIMANTAS BENDZIUS: continúa con su racha de partidos siendo el mejor del equipo. Asumió responsabilidades, trabajó a pleno rendimiento en defensa y supo sacar ventajas en el poste y corriendo en transición. Tiró algún triple liberado que podría haber metido, pero poco se puede reprochar a otro muy buen partido del lituano. 16+6 en 28 minutos, con 9 faltas provocadas, para 20 de valoración
• ALBERT SÀBAT: le entraron los triples de inicio y ganó en confianza ante la floja defensa de Fisher, pero en cuanto entró en cancha Schreiner y empezó a recibir una presión intensa volvieron los viejos problemas de siempre. Aún con todo, fue el máximo anotador del equipo y mejoró pasadas actuaciones, pero manteniendo las dudas sobre su dirección de juego. 17+3+3 en 19 minutos, para 17 de valoración
• MATT THOMAS: seguramente su peor partido de la temporada, anulado por la defensa de Álex López y desacertado en los pocos tiros que intentó, cada vez más precipitado ante su mal día, algo que también pagó en defensa. Borrón y cuenta nueva, a pensar en el próximo partido. 0+2+2 en 15 minutos, para -2 de valoración
• NACHO LLOVET: duro en defensa y yendo bien al rebote ofensivo, pero sin más aportación en ataque que un par de palmeos y sumando pérdidas y tapones recibidos al cómputo global del equipo. Marcado por los árbitros en defensa, de todos modos controló muchos minutos a Thompson con éxito. 6+3 (los 3 en ataque)+1 en 27 minutos, con 3 pérdidas y 5 faltas provocadas, para 10 de valoración
• ARTEM PUSTOVYI: dominante a fases, empezó mal con Huskic y tuvo unos minutos de pelea sorda con Saiz, para de nuevo emparejarse con Huskic y superarlo claramente en mabos aros durante unos minutos más. La tercera falta lo quitó del partido y el equipo lo notó mucho. En ataque alternó buenas acciones en la pintura con algunas pérdidas de más. 10+6 en 29 minutos, con 4 pérdidas y 4 tapones, para 11 de valoración
• DAVID NAVARRO: muchos minutos en cancha, por el mal día de Thomas y por su habitual capacidad de doblar como base y escolta. Estuvo en los mejores minutos del segundo cuarto, pero también se comió un par de tapones intentando penetraciones imposibles cuando las cosas pintaban mal en la segunda mitad. Mucha actividad defensiva ayudando en la pintura para cortar pases. 5+3+2 en 25 minutos, para 1 de valoración
• BEN SIMONS: esta vez sí aportó en ataque, con acierto en sus tiros y buena actividad como 3. Al final no lo entraron los triples que habrían mantenido al Obra en la pelea. Ayudó en el rebote y participó de la buena defensa zonal en los minutos finales. Con sus pros y contras conocidos, en esta ocasión sí rindió a buen nivel y se mereció los minutos en cancha. 10+5+3 en 20 minutos, para 10 de valoración
• NEMANJA RADOVIC: tenía muchas opciones en el poste pero no recibió demasiados balones en condiciones. En defensa sufrió los mejores minutos de Thompson sin la ayuda de Pustovyi, y en ataque se peleó contra el mundo sin dejar de intentarlo, pero también sin dejar de obcecarse hasta completar una extraña hoja estadística. Quedó la impresión de ser un partido en el que tendría que haber sido diferencial en la cancha. 12+9 (¡8 en ataque!)+1, con 4 tapones recibidos, para 7 de valoración
• PEPE POZAS: bien en los buenos minutos del segundo cuarto, cuando no hubo pérdidas y el equipo controló el ritmo de juego con buen movimiento de balón y defensa sólida. En su reaparición ya no le fue tan bien, descentrado por los golpes de Schreiner hasta recibir técnica e irse al banquillo para no regresar al juego. 0+1+2 en 13 minutos, para -1 de valoración
• NICK SPIRES: su defensa es castigada por los equipos rivales en cada jugada, y el pivot sueco sufre enormemente para mantener el tipo en el cuerpo a cuerpo. Una vez más, los interiores rivales se lo comieron en el 1x1, y su facilidad en ataque no encontró balones que aporvechar. 1+1 en 6 minutos, para 1 de valoración

El Obradoiro perdió la oportunidad de dejar resuelta la permanencia y no tuvo opciones de triunfo en los minutos finales ante un rival que mostró mayor intensidad en los momentos en los que abrió la brecha definitiva. Con Corbacho y Laksa sin participar (seguramente por problemas físicos) y Thomas en su peor día del curso, al Obra le faltaron recursos para ser estable durante los 40 minutos ante un Burgos que era más que ganable. Con esta derrota, el equipo corre el riesgo de verse en una aparente tierra de nadie cuando todavía faltan 9 partidos pero en realidad todavía no tiene cerrado del todo el objetivo de la permanencia. El calendario de las próximas jornadas parece desfavorable para sumar (Madrid y Unicaja), y aunque la lucha por el descenso sigue estando muy lejana (resulta difícil creer en que los 3 equipos empatados a 7 triunfos consigan todos ganar otros 4 o incluso 5 partidos más) no conviene caer en una relajación que pueda empañar una temporada realmente meritoria hasta el momento.