Obradoiro - Valladolid (la previa)

(foto: ACB Fotoclick)

Domingo de Pascua en Sar. El Obradoiro recibe a un Valladolid completamente descolgado del resto de la liga y que de perder habrá certificado su descenso a LEB Oro con nada menos que 6 jornadas de antelación. Para el Obra tiene que ser el partido que rompa la mala racha con desgracias de todo tipo que destrozó lo que llevaba camino de ser otra temporada sobresaliente. Aún así, el triunfo ante los pucelanos dejaría casi asegurado el gran objetivo del equipo, la permanencia en la ACB, que ya de por sí es un grandísimo premio para nuestro club.

El CB Valladolid lleva varios años comportándose como un auténtico muerto viviente. En una competición más estricta con sus propias normas posiblemente habría dejado la liga hace por lo menos 2 temporadas, pero en este curso 2013/14 la situación del club raya lo absurdo: ya en el verano parecía imposible que el equipo saliera en ACB, pero a última hora se formó una plantilla de mínimos que no ha podido repetir el milagro de la temporada pasada. El equipo nunca ha podido competir en igualdad de condiciones, con continuos cambios de jugadores, fugas por impagos y derrotas amplísimas. Solo han ganado 3 partidos: en la 3º jornada ante un Cajasol en plena formación, en la 12ª ante un Obradoiro que mostró su peor cara en el partido más asequible y en la 25ª ante un Manresa en caída libre. Ese raquítico 3-10 en su cancha se completa con un apabullante 0-14 a domicilio, con derrotas escandalosas en muchas ocasiones: -34 con el Real Madrid, -14 con Estudiantes, -51 en Valencia, -3 en Manresa, -11 en Murcia, -59 en Barcelona, -16 en La Laguna, -16 en Zaragoza, -54 en Málaga, -29 en Las Palmas, -17 en Vitoria, -22 en Badalona, -16 en Sevilla y -16 en Bilbao. Con el club en plena descomposición, con el descenso asegurado en la práctica y sin dinero en el club para pagar a sus jugadores, el partido de Sar es uno más en el que intentar ser profesionales y dar una imagen de equipo, sin mayor presión por su parte.

Ricard Casas afrontó la misión imposible de hacer otro milagro a orillas del Pisuerga, pero pronto se vio que esta vez se iba a imponer la dura realidad. La plantilla pucelana va ya por el jugador número 20, con cambios de jugadores desde la misma pretemporada hasta la última semana. En tales circunstancias, conjuntar algo parecido a un equipo es una quimera, con 8 jugadores dados de baja y solo 6 que permanecen desde la primera jornada de liga. El CB Valladolid lidera todas las estadísticas negativas de la competición: últimos en ataque (menos de 70 ppp), en defensa (casi 90 ppp encajados), en rebotes, en asistencias, en tiros de 2 (46% de acierto) y en triples (no llegan ni al 30%). Apenas han sido capaces de competir en algún partido aislado, sobre todo en su propia cancha, y les cuesta un mundo mantener un mínimo nivel en la cancha en cuanto tienen que echar mano de la rotación de banquillo. En la posición de base, Pepe Pozas se ha encontrado con una buena oportunidad de ganar experiencia en ACB. El malagueño llegó cedido en febrero y ha tenido buenas actuaciones. Es un jugador pequeño y rápido, buen pasador y hábil en el robo. Su falta de experiencia le lleva a ser excesivamente fogoso (casi siempre al borde la eliminación por faltas, aunque también fuerza más de 5 por partido a sus rivales), pero ahora mismo es de lo mejor del equipo. Armon Johnson llegó hace un mes tras la marcha de Jason Rowe (clave en el partido de ida), con la intención de recuperar la forma tras un largo periodo sin jugar por lesión. Es un jugador fuerte y buen defensor, con capacidad para penetrar pero con un tiro exterior irregular y poca capacidad de pase. El islandés Hördur Vilhjálmsson lleva varias semanas sin jugar, aunque sigue en la plantilla. Poco positivo se puede decir de su aportación al equipo durante la temporada, con una valoración media de 0,9 jugando casi 20 mpp. Todavía hay un cuarto base, el canterano Antonio Izquierdo, que se limita a cumplir el número de cupos obligatorio sin apenas saltar a cancha (15 minutos en toda la temporada). En la posición de escolta, Danilo Andjusic pasa por ser el especialista tirador del equipo. El serbio tiene muy buena mano, aunque sus porcentajes no están ayudados por las necesidades del equipo. Es un jugador bastante unidimensional, pero es el máximo anotador pucelano con cerca de 13 ppp, siendo además muy regular en su aportación ofensiva. El canterano Iván Martínez está teniendo minutos en medio del caos del equipo. Es trabajador e intenta ser fuerte en defensa, aunque en ataque apenas tiene aportación (exceptuando su record anotador de 10 puntos en el partido contra el Obradoiro). Marcos Suka-Umu es de los pocos que siguen en el equipo desde el inicio de la temporada. Su importancia en la rotación ha ido a menos con el paso de los partidos, cada vez con menos minutos en cancha (sobre 15 por partido) y con poca aportación en ataque. Ayuda en el rebote e intenta trabajar en defensa. Lamont Mack llegó hace menos de un mes tras la lesión de Cvetinovic. Es un alero fuerte y potente, con buena mano desde el exterior y capacidad par jugar de fuera hacia dentro. Corre bien la cancha y ayuda en el rebote, pero tiene una clara tendencia a jugárselas todas, sobre todo desde lejos.  Djordje Drenovac es un ala-pivot zurdo que puede tirar de media distancia y penetrar además de ayudar al rebote. El serbio puede ejercer de 3 o de 4, aunque no destaca por ser un buen posteador. En las últimas semanas está siendo de los mejores del equipo (15+6 en la derrota en Bilbao, 14 puntos la semana pasada). Nuestro viejo conocido Héctor Manzano debutó la semana pasada con los pucelanos. Espíritu de trabajo, algo de endeblez física para jugar por dentro y buena mano desde la media distancia son las credenciales que recordamos de su paso por el Obra. Omari Johnson es lo más sólido de esta triste temporada en Valladolid. Es un ala-pivot con buena mano desde la distancia (aunque lleva unas semanas muy desacertado en esa faceta), capacidad reboteadora y potencia para jugar en la pintura. El jamaicano lidera al equipo en minutos, rebotes (atención a su rebote de ataque) y valoración conjunta, y seguramente es el jugador más interesante del equipo. El griego Dimitris Haritopoulos es el jugador más interior del equipo. Es un jugador rocoso y trabajador, que se sabe buscar la vida en la zona y en las circunstancias actuales de la plantilla es lo más parecido a un pivot que tienen. Fuerza bastantes faltas y es muy experto.

La plantilla del rival

• Bases
• 4.- Pepe POZAS (1,81 m, 21 años). 7,1 ppp, 1,5 rpp, 4,1 app, 1,8 brpp, 3,8 fpp, 5,1 fppp, 11,4 val (8 partidos)
• 23.- Armon JOHNSON (1,91 m, 25 años). 6,8 ppp, 1,3 rpp, 2,8 app (4 partidos)
• 15.- Hördur WIHJÁLMSSON (1,90 m, 25 años). 4 ppp, 1 rpp, 1,2 app
• 10.- Antonio IZQUIERDO (1,88 m, 21 años). 0,3 ppp, 0 rpp, 0 app (8 partidos)
• Aleros
• 31.- Danilo ANDJUSIC (1,95 m, 23 años). 12,6 ppp, 1,7 rpp, 1,1 app
• 18.- Iván MARTÍNEZ (1,92 m, 24 años). 2,4 ppp, 1,6 rpp, 0,7 app, 11% t3
• 33.- Marcos SUKA-UMU (1,92 m, 28 años). 4,8 ppp, 2,3 rpp, 1,5 app
• 8.- Lamont MACK (2,01 m, 27 años). 7 ppp, 3 rpp, 1,3 app, 42% t3 (4 partidos)
• Pivots
• 13.- Djordje DRENOVAC (2,01 m, 21 años). 7 ppp, 2,5 rpp, 0,3 app
• 11.- Héctor MANZANO (2,05 m, 33 años). 0 p, 0r, 0a (1 partido)
• 24.- Omari JOHNSON (2,05 m, 24 años). 12 ppp, 6 rpp (2,4 ro), 0,6 app, 11,6 val
• 9.- Dimitris HARITOPOULOS (2,05 m, 30 años). 10,7 ppp, 4,4 rpp, 0,4 app, 4,3 fppp

El Obradoiro tiene ante sí el partido decisivo para amarrar casi al cien por ciento el objetivo de la permanencia. Incluso es posible que las 10 victorias actuales pudieran ser suficientes de no mediar una inesperada reacción del Manresa, pero la undécima victoria obligaría a los catalanes a hacer un casi impensable 5 de 7 para superar a los nuestros en la clasificación final. El rival es un equipo hundido, que únicamente aspira a terminar la temporada sin bajar los brazos del todo y que llegará a Sar sin presión alguna. Quizás ese sea el único peligro para los nuestros, si no se consigue imponer la superioridad del Obradoiro en los primeros minutos. La paciencia de la afición de Sar para no exigir demasiadas prisas por ganar al equipo será importante en esta ocasión: si el Obra juega a un nivel aceptable y va desgastando al rival poco a poco nada hace pensar en que la victoria se pueda escapar. Aún así hay que prestar atención a los mejores jugadores pucelanos, con Omari Johnson como ala-pivot con posibilidades de jugar abierto y capacidad de ganar por velocidad a nuestra batería de cuatros. El cuidado con los triples de Andjusic y la metralleta previsible de Mack desde cualquier posición ha de ser tenido en cuenta por nuestra defensa. Aún así, nuestra rotación interior debe imponer su superioridad en el rebote y ganar muchos puntos en la pintura, ante un rival escaso en altura y kilos. El juego eléctrico de Pozas debe ser frenado por Rafa Luz con paciencia y cabeza fría, y la aportación de nuestro cuarteto exterior tiene que ser más estable que en las últimas semanas, en las que Corbacho ha tenido muy poca ayuda en la faceta anotadora. Si el Obradoiro hace un partido más o menos sólido ha de ganar el partido, como han hecho todos los equipos que han recibido al Valladolid esta temporada. Pero, como siempre, las confianzas o las prisas no son buenas consejeras, y el equipo ha de saltar a la cancha con intensidad pero también con paciencia.

Datos del partido
Obradoiro - Valladolid. 28ª jornada ACB. Fontes do Sar. Domingo, 20 de abril. 20:00 horas. Transmitido por Orange Arena

Resultados anteriores

• temp. 82/83: Obradoiro - Valladolid 103-102 (1ª División)
• temp. 09/10: Obradoiro - Valladolid 78-80
• temp. 11/12: Obradoiro - Valladolid 63-72
• temp. 12/13: Obradoiro - Valladolid 89-56