lunes, 10 de diciembre de 2018

Con K de Kostas y de Kyle (78-86)

Kostas Vasileiadis (foto: ACB FotoClick)

El Obradoiro aprovechó una memorable actuación de Kostas Vasileiaidis, que destrozó el record de triples en un partido del club con 10 aciertos, para conseguir la primera victoria de su historia en Zaragoza. El cañonero griego, nombrado MVP de la jornada en la liga (33 puntos para 31 de valoración), estuvo brillantemente secundado por el mejor Kyle Singler de la temporada (21+8 para 30 de valoración), y con la sólida dirección de Sàbat (11 asistencias) y el trabajo colectivo del equipo en defensa consiguió primero mandar en el marcador en los primeros minutos para ya tras el descanso romper el partido con ventajas que llegaron a ser de hasta 17 puntos (60-77). El festival de triples de los de Moncho Fernández, que conseguía la centésima victoria de su carrera en ACB, en el que además de los 10 de Kostas apoyó un buen Simons con otros 4 más, hizo inútil la reacción final aragonesa, que llegó a acercar a los locales a 6 pero no fue a mayores ante la tranquilidad de los nuestros en los tiros libres. Con este triunfo, el Obradoiro se aleja de la zona peligrosa y se sitúa en el puesto 14 con un record de 4-7.


Visitaba el Obradoiro una cancha maldita por antonomasia, ya que nunca había conseguido ganar en Zaragoza en toda su historia. Ante un equipo local en racha positiva y que comenzaba con McCalebb, Seibutis, Okoye, Radovic y Justiz, los nuestros sufrían la conocida baja de Pozas mas los problemas físicos de Obst, presentando inicialmente a Sàbat, Vasileiadis, Singler, Llovet y Brodziansky. El partido comenzaba bastante desangelado, con el Obra apostando por el triple desde el inicio pero sin acierto, frente a un Zaragoza en el que la primera bandeja del temido McCalebb se iba a quedar en casi única acción positiva del base local en todo el encuentro. El poderoso Justiz imponía su ley bajo los aros, pero Singler sacaba réditos de sus penetraciones y su trabajo sordo, Llovet peleaba con fuerza el rebote defensivo y, aunque las pérdidas seguían siendo demasiadas, ya aparecían los 2 primeros triples de Kostas para lanzar al Obra en ataque. Singler añadía otro más para poner 7 arriba al Obra (8-15), y a pesar de un par de bandejas seguidas locales rompiendo nuestra defensa volvían de nuevo los triples de un Kostas imparable que elevaban a +9 la renta obradoirista (12-21). Con Kostas (12) y Kyle (9) como únicos anotadores del equipo y el Obra tirando triples como metralletas, el Obra terminaba un extraño primer cuarto con 6 puntos de renta tras el triple de Berhanemeskel (15-21).

El quinteto de rotación local equilibraba el partido en el segundo cuarto ante un Obra que se quedaba sin sus referentes de los primeros minutos. Navarro como base y de Zeeuw por dentro peleaban pero sin acierto, mientras Berhanemeskel lideraba el parcial que desdel el triple final del primer cuarto se iba a un contundente 10-0 (22-21). Simons anotaba un triple para romper la sequía, aunque respondido al momento por el inspirado combo local, pero el equipo sufría en ataque, perdiendo balones y haciendo tiros forzados. Simons anotaba otra buena suspensión de 2 y mantenía al Obra vivo en medio de un partido que se acercaba peligrosamente a un correcalles por ambos bandos.El segundo triple de Simons compensaba los errores de un disminuido físicamente Obst, ya con Sàbat de nuevo en la dirección y Llovet en la defensa del rebote defensivo. Brodziansky anotaba un par de canastas en el poste muy bien trabajadas por todo el equipo, y el tercer triple de Simons (ya con 11 puntos) venía seguido por el primero de un sólido Sàbat para un efímero +3 para los nuestros, aunque el intenso Okoye equilibraba el marcador al terminar el cuarto (39-39).

El Obradoiro mandaba desde el inicio del tercer cuarto, con el quinto triplazo de Kostas para abrir boca, a pesar de la pegajosa presión de McCalebb sobre Sàbat. Okoye respondía al instante con la misma moneda, pero Brodziansky palmeaba un rebote de ataque y Singler añadía más puntos a su buen trabajo defensivo, primero en el poste bajo sobre Okoye y seguidamente con un triple en transición. El Obra dominaba el tempo del juego más allá de un par de apariciones puntuales de los oscurecidos Radovic y McCalebb , y el sexto triplazo de Kostas, de nuevo con la mano del desfensor encima, daba inicio a la ruptura en el marcador. El propio Vasileiadis asistía para la penetración en mate de Brodziansky, y tras el tiempo muerto de Fisac el Obra seguía sumando con Brodziansky enorme en el rebote ofensivo para trabajarse una gran canasta bajo aro. Singler defendía bien en el poste a Radovic y tras forzar la falta de Okoye en penetración recibía un hachazo del propio montenegrino que tras petición de Moncho Fernández castigado con antideportiva. Nuestro jugador sumaba 3 de los 4 tiros libres para culminar un parcial de 0-10 roto con un mate de Vázquez. Quien no paraba de anotar triples frontales era un Kostas imperial, ahora desde 8 metros, para el +12 de los nuestros, y a pesar de la respuesta desde los 6,75 de Berhanemeskel, Llovet ganaba un heroico rebote en ataque para que tras el tiempo muerto de Moncho llegara otro triple más del cañonero griego, ahora desde un lateral, nada menos que el octavo, que mantenía al Obra en su máxima renta. Justiz taponaba una buena jugada en la pintura de Brodziansky, pero la defensa zonal local reventaba por completo con la exhibición del 34 del Obra, que se situaba ya en un nuevo record del club con el noveno triple para cerrar un espectacular tercer cuarto con una ventaja de 14 puntos (54-68).

El cuarto final no podía comenzar de otra forma que no fuera con otro triplazo más del genial Kostas, el décimo, para poner al Obra 17 arriba (54-71). El poderío físico de Justiz y un par de pérdidas de un desafortunado de Zeeuw ponían algo de incertidumbre en el marcador, pero el Obra recuperaba su renta máxima con 3 tiros libres del inefable Kostas tras sufrir falta en el intento de un nuevo triple y, tras un robo y un rebote ofensivo de Llovet, con otros 3 puntos desde detrás de los 6,75 de un también acertado Simons (60-77). El Obra lo tenía en la mano con solo 7 minutos por delante y ya solo era cuestión de gestionar la enorme ventaja que tenía. La defensa seguía complicando la labor de los jugadores locales y ni siquiera el parón anotador de los nuestros ponía en riesgo el resultado, Okoye tiraba de los suyos con su habitual intensidad y forzaba un tiempo muerto de Moncho Fernández tras anotar 5 puntos consecutivos que cerraban un parcial de 9-0 local (69-77). El Obra se centraba demasiado en agotar los minutos, con Navarro en pista por un cansado Kostas, y perdía las referencias en ataque, con lo cual solo sobrevivía con un par de tiros libres de Nacho Llovet a un Zaragoza en el que Okoy machavaba por duplicado y acercaba a los suyos a solo 6 con poco más de minuto y medio por delante (73-79), pero Singler evitaba más sufrimientos con su acierto desde la línea de libres, con los locales malgastando sus últimos cartuchos sin éxito. El Obra llegaba por encima del +10 a los segundos finales y se permitía un final más o menos relajado, cerrado con un triple de Okoye y el enésimo rebote de Llovet, para cerrar un triunfo en una cancha que por fin dejaba de ser maldita para los nuestros (78-86).

Datos a destacar

  • victoria importantísima en un momento muy delicado. El equipo encontró un acierto brutal en el triple y añadió una sólida defensa que cortó la aportación de un McCalebb desaparecido en combate. Las pérdidas (17) siguieron siendo excesivas, pero el Obra controló el juego casi en todo momento y tuvo las ideas más claras que su rival casi siempre (71-96 en valoración)
  • 37 intentos triples por 23 tiros de 2. Más desequilibrio que nunca, favorecido por el espectacular día en el tiro de Kostas, bien secundado por Simons y hasta por SIngler, para un enorme 46% en triples con 17 canastas desde detrás de los 6,75. Con ese arsenal exterior resulta muy difícil perder un partido, sobre todo si la solidaridad del equipo consigue equilibrar la pelea reboteadora ante un rival tan potente por dentro como Zaragoza (41-39)
  • el equipo estuvo muy corto en rotación, con la baja de Pozas y los mermados Obst, Hlinason o el siempre renqueante de Zeeuw. Los jugadores base tuvieron que jugar auténticas minutadas, pero el Obra llegó con mucha ventaja a los minutos finales y no necesitó ese aire extra que quizás le habría faltado en un contexto más igualado
  • KOSTAS VASILEIADIS: qué decir del histórico partido del griego con el que consiguió una nueva marca máxima en la historia del club. Se tiró hasta las zapatillas, con nada menos que 18 triples intentados (y ningún intento más), pero anotar 10 triples está al alcance únicamente de genios como él. Destrozó la defensa local con sus salidas tras bloqueo, clavando triples con el defensa pegado y elevando al Obra hasta ese +17 que evitó la reacción final rojilla. MVP de la jornada, +17 con él en cancha (máximo del equipo) y héroe de una victoria clave para la temporada. 33+3+1 en 28 minutos, para 31 de valoración
  • ALBERT SÀBAT: tarea dura para el catalán, como único base real ante la falta de Pozas y un rival del nivel de McCalebb enfrente. Sin embargo, Sàbat supo llevar en ritmo muy bien, pasar buenos balones a los tiradores, evitar pérdidas y además cortocircuitar el juego del base local, que pasó sin pena ni gloria por el partido. Solo le faltó anotar algún triple más de los suyos en esas transiciones (1 de 6 en triples), pero sin duda hizo uno de los pártidos más sólidos desde que está en el Obra. Sin apenas descanso, Sàbat fue uno de los mejores del buen partido del equipo (+13 con él en cancha). 4+2+11 en 37 minutos, para 11 de valoración
  • KYLE SINGLER: si Kostas fue el martillo ofensivo, Singler fue el todoterreno del Obra en la pista. El norteamericano sumó delante (posteando, desde el triple y con un enorme 11 de 12 en libres) y detrás (gran defensa, cerrando el rebote y ayudando a parar a los interiores rivales). Su mejor partido con el Obra de lejos (+15 con él en cancha), ilusionante para semanas futuras si consigue repetir el nivel mostrado en Zaragoza, solo la exhibición de Kostas le libró de ser el MVP de la jornada. 21+8 en 25 minutos, con 8 faltas provocadas, para 30 de valoración
  • NACHO LLOVET: la argamasa del equipo atrás, el jugador sólido que tapa todos los huecos y lee todas las situaciones de juego. Ni siquiera en un día desacertado en ataque (0 de 5 en tiros de campo y varias pérdidas) dejó el catalán de ser decisivo para la victoria del Obra. Enorme en el rebote, duro en defensa tapando huecos y con una minutada tremenda (también +15 con él en cancha). 2+11+2 en 34 minutos, con 4 pérdidas y 5 faltas provocadas, para 9 de valoración
  • VLADI BRODZIANSKY: el físico poderoso de Justiz le creó muchos problemas atrás, aunque el eslovaco también supo encontrar sus momentos de acierto en el poste bajo con calidad. Peleó el rebote, apoyó en anotación a los líderes del partido (las 2 K's) y, más allá de esos problemillas habituales de falta de veteranía (algún tapón recibido, alguna falta evitable) rindió un buen expediente (+14 con él en cancha). 10+6 en 24 minutos, para 11 de valoración
  • BEN SIMONS: el Obra tuvo poco apoyo de la rotación en este partido, pero por eso mismo el trabajo de Simons resultó clave para que el difícil segundo cuarto no supusiera un golpe demasiado duro para el equipo. El alero norteamericano tiró muy bien (4 de 6 triples), aguantó el tirón local del mencionado segundo cuarto (11 puntos en ese período) y de nuevo ayudó en la ruptura final con otro triple para el +17 que cortó la primera reacción local. Luchó bien atrás en el 1x1 interior y dejó muestras de estar ya muy recuperado de sus semanas fuera del equipo por lesión. Pocos minutos muy bien aprovechados, a pesar de ese engañoso -12 con él en cancha, el peor del equipo. 14+0+1 en 18 minutos, para 8 de valoración
  • TRYGGVI HLINASON: voluntarioso e intimidador por momentos, pero con poca presencia en la cancha, sin apenas intentar nada en defensa. 0+1+1 en 13 minutos, para -1 de valroación
  • MAX DE ZEEUW: sigue sin parecerse en nada al jugador que brilló en la primera jornada. Con ganas pero fallón atrás, sin acierto en ataque (0 de 4 en tiros). Malas decisiones y aportación mínima, el equipo sigue esperando a uno de sus jugadores a priori clave para la temporada. 0+4+1 en 9 minutos, con 3 pérdidas, para -5 de valoración
  • DAVID NAVARRO: mala aportación como base de rotación que obligó a no dar casi descanso a Sàbat en el segundo cuarto. Regresó en los minutos finales para mantener el balón y la ventaja y cumplió a pesar de alguna pérdida, pero no se puede decir que el valenciano hiciera un gran partido. 2+2 en 7 minutos, para 4 de valoración
  • ANDY OBST: estaba muy mermado físicamente y lo intentó, pero sin éxito. 0+0 en 5 minutos, con 2 pérdidas, para -4 de valoración
  • NICK SPIRES: apenas 3 segundos testimoniales sin relevancia alguna
El Obradoiro consiguió una grandísima victoria en un momento complicado, con el equipo mermado y mirando de reojo la zona más baja de la tabla. Asaltar Zaragoza no es fácil (de hecho hasta este sábado había sido imposible) y el Obra lo logró de la mano de una exhibición espectacular de un brillante Kostas y un menos luminoso pero igual de efectivo Kyle. Con la cuarta victoria en el bolsillo y otra semana más de trabajo y mejoría (esperemos) en los lesionados, el futuro se ve un poco menos oscuro ante los 2 próximos partidos en casa (frente a Estudiantes y Manresa), en los cuales el Obra puede tener la oportunidad de encarrilar la temporada al abrigo de la caldeira. 2 citas decisivas para cerrar el año en Sar en las que la afición ha de ser clave.


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